Como un vaticinio, una proyección adornaba anoche la fachada principal del Palau de la Generalitat: «Mónica Oltra. Presidenta. Imparables». Se repetía como un mantra: como el deseo que a través de la ley de la atracción se espera cumplir. Oltra, número uno a la Generalitat, cerró anoche una campaña electoral al más puro estilo valenciano: con una cena popular en la plaza del pueblo.

El «pueblo» era València y el mitin de clausura se celebró en la Plaza de la Virgen, epicentro de la ciudad. Así quiso ayer la todavía vicepresidenta representar a su partido, como la opción política «de casa», como apuntó el candidato al Congreso, Joan Baldoví, que asistió a la jornada de ayer como al «Día D», el del desembarco de Normandía. «Hemos tenido en València tres políticos de paso que terminarán su fiesta en Madrid», dijo, en referencia al cierre de campaña de Pedro Sánchez, por el PSOE, Pablo Casado, por el PP y Albert Rivera, por Ciudadanos, que han confluido en València a un día de las elecciones.

La misma metáfora le valió a Baldoví para reforzar la idea de que solo Compromís es el partido que defiende los intereses valencianos. «No hemos desembarcado porque vivimos aquí». Son, como la propia Oltra aseguró, «la garantía de que el cambio de 2015 continúe y se convierta en una transformación profunda que estamos llevando a cabo desde las instituciones».

La vicepresidenta aprovechó su última intervención pública antes de la jornada de reflexión para recordar cómo la política ha cambiado con el pacto del Botànic en el Palau de la Generalitat, con los mismos argumentos que, como reconoció, ha utilizado durante toda la campaña electoral. «Hemos mejorado la vida de los valencianos con un gobierno honrado, gracias al voto valiente de mujeres y hombres que en 2015 apostaron por Compromís», dijo, y animó a que ese cambio en las instituciones debe continuar en 2019.

Oltra no omitió la amenaza de la extrema derecha, quien mostró su potencia el jueves en València. Frente a las banderas «de odio y miedo» que algunos agitan, en referencia a Vox, «nosotros hemos hecho una campaña con argumentos, razones y sentimientos que salen del corazón, no del hígado», dijo.

En un cierre de campaña que estuvo amenizado por el concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de València, Pere Fuset, que animó a las casi 400 personas que asistieron a la Plaza de la Virgen a una cena de «pa i porta», un acto «de fraternidad» en una primavera «que tiene que traer el futuro», como la propia Oltra reconoció.

El futuro de Compromís, según el Cis, se apoya en la horquilla de 17-18 diputados en las Corts, mientras que en el Congreso de los Diputados lograrían entre 1 y 2 escaños. Si los resultados coinciden, Baldoví debería reeditar su escaño en la noche de mañana. Ayer insistió en que todas las promesas que los tres líderes valencianos hicieron ayer en València se las recordará una a una en la Cámara Baja, para que no caigan en saco roto como han hecho hasta ahora. A Baldoví le acompañó Isaura Navarro, que aspira ahora a obtener el segundo escaño que podría obtener la coalición nacionalista en Madrid.

El alcalde de València y candidato de Compromís el 26 de mayo, Joan Ribó, también intervino en el último acto de la campaña autonómica, a escasas semanas de empezar la suya propia. Remitió al último pleno celebrado en el consistorio valenciano, donde en su despedida recordó que con su pacto de gobierno municipal junto al PSPV y València en Comú, «la izquierda ha demostrado que sabe gobernar sin problemas». En ese sentido, alegó a la rápida aprobación de los presupuestos municipales y a haber sido capaces de salir del plan de ajuste.

Por esa misma razón, Ribó pidió el voto para Mónica Oltra, porque la Generalitat ha funcionado bien «pero tiene que funcionar mejor». Y solo concibe una alternativa, que sea con una mujer, «y se llama Mónica Oltra».

Ribó quiso recordar a los militantes, a los votantes y a los indecisos qué es Compromís. Un partido de izquierdas, valencianista y ecológico «que sabe hacer las cosas y gobernar en coalición». Con la vista puesta en los intereses municipales, el alcalde llamó a llegar a un acuerdo a nivel estatal para tener un grupo parlamentario «importante», con denominación de origen valenciana, que les diga a los líderes nacionales que ayer «desembarcaron» en València que no se olviden de las promesas que han hecho en el Cap i Casal. Ribó señaló dos urgencias para la ciudad: el soterramiento de las vías del tren o la deuda con la Marina de València que el presidente Pedro Sánchez no ha cumplido.

Si la cena popular clausuró la campaña electoral, por la mañana los tres candidatos también tuvieron una agenda conjunta. Oltra, Baldoví y Ribó visitaron precisamente la Marina de València, donde repasaron los intereses valencianos que Compromís va a defender tanto desde el gobierno autonómico como desde el Congreso. La financiación justa y las inversiones adecuadas son la llave para que los de Oltra den sus votos al futuro presidente del Estado. Oltra recapituló las «deudas» que el gobierno Central tiene con València. Al Parc Central le falta «más de la mitad» por hacer y para poder terminar las obras necesita las inversiones del Gobierno. «Ya está bien que en las grandes ciudades uno vaya y el tren pase por abajo y no parta la ciudad por el medio, como pasa aquí, que se parte Malilla y Russafa, por unas vías que tenían que estar enterradas hace más de 20 años», lamentó.

Respecto a la deuda de La Marina, Oltra se preguntó por qué a Sevilla se le pagó la Expo y a Zaragoza también. «Las Olimpiadas de Barcelona las pagaron todos los españoles porque era un evento para toda España, mientras que los valencianos tenemos que cargar con la deuda de 460 millones que supone la construcción de La Marina para la celebración de la Copa América», denunció.

«¿Por qué no somos como el resto? No queremos ser más que nadie, pero estamos hartos de ser siempre los últimos de todo, que prometan cosas y no se materialicen». Oltra recordó que se hizo el anuncio del pago de una parte de la deuda de La Marina, 350 millones: « se hizo la promesa, la foto y ¿dónde está el dinero?», denunció, al tiempo que resaltó que quien quiera los votos de Compromís deberá comprometerse con la financiación y estas inversiones, como la conexión del aeropuerto Alicante-Elche o los trenes cercanías que aún están pendientes de ejecutar.