La XV Conferencia Living Lakes 2019, con l'Albufera de epicentro, empezó ayer en València con el cambio climático y sus consecuencias como común denominador en todas las intervenciones. Hugo Morán, secretario de Estado de Medio Ambiente en funciones, no dudaba en calificar de «dramáticos» los datos del último informe de la Unesco, en el que se concluye que el aumento de la temperatura en el planeta situará al borde de la extinción a miles de especies de flora y fauna. «Afectará especialmente a la zona del Mediterráneo, donde los efectos serán más devastadores», incidía Morán. En ese escenario tan preocupante, «la conservación y restauración de humedales como el de l'Albufera, que actúan como escudos frente a la intrusión marina, es prioritario para hacer frente a la pérdida de biodiversidad y en el proceso de adaptación». «Son sumideros de carbono y esponjas contra las inundaciones», enfatizaba Morán.

Además, el secretario de Estado abogaba por «soluciones basadas en la naturaleza», con la elaboración de un nuevo plan estratégico para enclaves como el del Parc Natural. «Lo abordaremos en los próximos meses», señalaba. El documento deberá contener información «actualizada» sobre el estado de conservación y el agua que entra en lagos como l'Albufera, su procedencia y calidad, tal como anunció hace unas semanas la ministra del ramo Teresa Ribera. Aspecto que pone de relieve «el papel de la Confederación Hidrográfica del Júcar», según Morán.

Un enclave como l'Albufera se sitúa ahora, conocido su papel regulador, como espacio a preservar en la estrategia hacia la renaturalización y la sostenibilidad. «Los humedales son verdaderas joyas que jalonan nuestro territorio, en el catálogo valenciano tenemos cuarenta y ocho que no se pueden entender ninguno de ellos separado del resto», incidía Elena Cebrián, consellera de Agricultura y Medio Ambiente. Al tiempo que recordaba su importancia, Cebrián destacaba la «enorme presión humana a la que están sometidos». «Hemos asumido el reto de recuperar su conexión, evitar una mayor degradación y ayudar a su restauración», añadía la consellera, colocando sobre la mesa los planes de saneamiento llevados a cabo por el gobierno valenciano. Una política medioambiental que ha permitido bajar la contaminación por nutrientes como el fósforo por primera vez desde 1996.

Los filtros verdes de l'Albufera son otro ejemplo del que toman nota estos días países como China, con representantes de varias regiones. Hoy está programada una visita al Tancat de la Pipa para conocer de primera mano su funcionamiento. El acto de apertura contó con la participación de la presidenta de Global Nature Fundation, Marion Hammerl y de Eduardo de Miguel, el director de Fundación Global Nature España, organizadora de la cita. «Hay que recuperar los regímenes hídricos depurando adecuadamente y hay que utilizar una parte de las aguas del Júcar en la propia restauración de l'Albufera», añadía de Miguel.