La ausencia de Ana Barceló en el organigrama del grupo da una pista sobre su posible continuidad en el Consell, si bien no es seguro que sea al frente de Sanidad. El hueco en Vivienda podrá ser para un rostro nuevo. Otra posibilidad es la cesión a Podemos de una de sus áreas fetiche. La salida de Salvador abre también la puerta de una conselleria a Francesc Colomer. Queda tiempo.