El Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV) pide a la Conselleria de Sanidad que los neuropediatras recuperen la atención a niños con Trastornos del Espectro del Autismo (TEA) en lugar de ser derivados a las Unidades de Salud Mental Infantil. En la actualidad, el TEA afecta a uno de cada 90 niños, con casos desde el grado mínimo hasta el más severo, según ha informado el sindicato en un comunicado.

«Hasta hace unos años, los neuropediatras analizaban cada caso y llevaban el seguimiento, derivando a los pequeños a centros especiales concertados con sus correspondientes psicopedagogos, logopedas y fisioterapeutas. Con el nuevo protocolo de atención al TEA, estos centros concertados desaparecen y el tratamiento pasa del ámbito sanitario a la asistencia social», lamenta el secretario general de CESM-CV, Andrés Cánovas. Ahora, los niños con TEA o parálisis cerebral se derivan a las Unidades de Salud Mental Infantil y a los Centros de Estimulación Temprana, «que es lugar idóneo para pacientes con problemas mínimos de retraso psicomotor, por ejemplo, pero no para uno con autismo, que necesita otro tipo de atención», apunta Cánovas.

La consecuencia es que, con el nuevo modelo, que entró en vigor en 2017, los pacientes y sus familias están «desamparados», sin un tratamiento adecuado y sin los recursos que hace unos años sí tenían. Esa es, entre otras, una de las principales reivindicaciones de la Plataforma Defensa TEA. «Con los centros de atención especializada, los niños primero tenían cubiertas 15 horas mensuales, que luego se rebajaron a 10 horas. Pero era un tratamiento muy específico y eficaz. Hoy las familias tienen que acudir a centros privados y costearse estos tratamientos, que suelen ser muy caros», detalla Cánovas. El Sindicato Médico pide que los neuropediatras recuperen las competencias para el tratamiento de los niños autistas, con el apoyo de psiquiatría.