Cuatro de cada diez hipertensos desconocen que sufren esta enfermedad crónica, cuyo tratamiento podría reducir en un cuarenta por ciento los casos de ictus, ya que el 70 % de estos accidentes cerebrovasculares se produce en pacientes con la tensión arterial alta.

Así lo ha puesto de manifiesto Belén Moliner, directora médico de Neurorhb, el Servicio de Neurorrehabilitación los Hospitales Vithas Nisa Valencia al Mar y Aguas Vivas, que asegura que la hipertensión se considera una enfermedad crónica y, por tanto, requiere un tratamiento permanente, según un comunicado del grupo hospitalario.

Según Moliner, si no se controla la hipertensión arterial "puede tener consecuencias fatales a lo largo de la vida" y recuerda que es el "factor de riesgo más importante tanto para la isquemia como la hemorragia cerebral, encontrándose en casi el 70 % de los pacientes con ictus".

"Con un seguimiento adecuado se podría controlar este riesgo prevalente en el 47 % en varones y el 39 % en mujeres, según hemos podido saber por un estudio realizado casi 29.000 participantes", ha indicado.

Moliner ha comentado existe evidencia suficiente a favor de los beneficios del tratamiento antihipertensivo, puesto que una disminución de la presión arterial (PA) sistólica y diastólica de 6 mm Hg, es capaz de reducir hasta un 48 % el riesgo de ictus.

De hecho, concluye la directora médica de Neurorhb, si se realizara un control exhaustivo de los factores de riesgo exógenos como la diabetes, el tabaquismo, el alcoholismo, el colesterol, el sedentarismo o el sobrepeso, su prevalencia se reduciría un 70 %