Casi 300.000 personas en España, de las cuales más de 32.000 se encuentran en la Comunitat Valenciana, conviven de forma diaria con artritis reumatoide (AR)i, una enfermedad autoinmune sistémica crónica que cursa en brotes y que provoca dolor, la inflamación crónica de las articulaciones y discapacidad. Debido a esto, junto al consumo de recursos sanitarios, los pacientes con artritis reumatoide se ven obligados a ausentarse más del trabajo, generan más días de baja o se jubilan antes que la población general, lo que produce una gran carga económica para la sociedad y una merma en la calidad de vida de las personas que sufren esta enfermedad.

Ante esta situación, un grupo multidisciplinar de expertos en artritis reumatoide se reunió para consensuar y definir un conjunto de medidas capaces de dar respuesta a esas necesidades médicas no cubiertas todavía en esta área. Tras meses de trabajo, nació el Proyecto SROI-AR, un conjunto de 22 propuestas para un abordaje ideal e integral de la artritis reumatoide cuyos resultados principales se han presentado en un póster en el 45º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Reumatología (SER) que se está celebrando estos días en València.

El póster "Retorno social de la inversión de un conjunto de propuestas para el abordaje ideal de la artritis reumatoide", presentado por la doctora Rosario García de Vicuña, jefa del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario de la Princesa, destaca en sus resultados que la puesta en marcha de estas propuestas generaría un retorno social de 913 millones de euros, el triple de la inversión necesaria para llevarla a cabo (283 millones de euros). Además, entre sus conclusiones, el póster destaca la generación de valor social a partir de tres vías (racionalizar el consumo de recursos sanitarios dentro del Sistema Nacional de Salud, mejorar el estado de salud y la calidad de vida de pacientes y cuidadores informales y mejorar la productividad laboral de los pacientes con AR) y la potencial aportación al SNS en el diseño de políticas sanitarias y/o de redistribución de recursos.

De hecho, antes de su presentación, Weber, la entidad que desarrollado el proyecto en colaboración con Lilly y ConArtritis, organizó una serie de reuniones con gestores de las distintas comunidades autónomas, entre las que se encontraba la Valenciana, para evaluar la viabilidad y la rentabilidad de la puesta en marcha de cada una de estas 22 propuestas.

Las propuestas para una mejora del abordaje de la AR suman un total de 22, distribuidas entre el área de diagnóstico (5 medidas), en pacientes con menos de 2 años desde el diagnóstico (7 medidas) y en pacientes con 2 o más años desde el diagnóstico (10 medidas).

Las propuestas enmarcadas en el área de diagnóstico apuntan a una detección precoz, mediante la formación en los síntomas dirigida a medicina de atención primaria y a urgencias, así como la implementación de rutas de acceso rápido desde atención primaria y atención especializada a reumatología. Además, incluye atención psicológica para todos los pacientes tras el diagnóstico.

En este sentido, la doctora García de Vicuña destaca que "la atención psicológica es una de las mayores carencias y el estado anímico de la persona es uno de los motivos más frecuentes de fracaso terapéutico, por lo que creo que se debería realizar una valoración psicológica a todos los pacientes con artritis reumatoide, al menos al inicio", ha apuntado. Además,García de Vicuña, que ha participado en el planteamiento de estas 22 propuestas, ha subrayado que el bienestar psicológico del paciente debería ser uno de los objetivos de tratamiento en artritis reumatoide.

En las dos siguientes categorías, el abordaje de la artritis reumatoide en una fase precoz (con dos años o menos de evolución desde el diagnóstico) y el abordaje de la artritis reumatoide en una fase avanzada (a partir de los dos años desde el diagnóstico), Garcia de Vicuña ha destacado la importancia de las consultas de artritis precoz y la puesta en marcha de consultas de enfermería propias para la atención de los pacientes. "Cada vez hay más evidencia de la eficiencia de estas consultas, que sirven para realizar una valoración holística de las necesidades del paciente y además realizan una labor de coordinación muy importante con otros profesionales y con los cuidadores", ha explicado.

Además, añade, estas consultas de enfermería podrían resultar esenciales también para la puesta en marcha de alguna otra de las propuestas que recoge el proyecto como, por ejemplo, las referidas al control estrecho de los síntomas para conseguir los mejores resultados de forma segura, la accesibilidad al especialista de pacientes sin cita cuando experimentan un brote de su enfermedad y la educación y empoderamiento del paciente.

De hecho, Jenny de la Torre, enfermera especialista en reumatología del Hospital General Universitario de València y otra de las profesionales que ha participado en la elaboración de las propuestas, asegura que "las intervenciones y cuidados de enfermería suponen un ahorro considerable al Sistema Nacional de Salud, tanto es así que el valor económico obtenido en el proyecto habría sido distinto si no se hubiera contado con las propuestas y aportaciones de enfermería". En su opinión, existe mucha diferencia entre los centros hospitalarios que cuentan con enfermería especializada en patologías reumáticas y los centros que no cuentan con él.

Sobre la metodología del Proyecto SROI-AR

El método SROI combina enfoques cualitativos, cuantitativos y financieros que permiten calcular el retorno o el valor social de las propuestas y demuestra la importancia de crear un diálogo formal entre los grupos de interés. Para el proyecto SROI-AR, se ha realizado un análisis prospectivo para evaluar el impacto clínico, asistencial, económico y social que tendría la implantación hipotética de 22 propuestas para la mejora del abordaje de la artritis reumatoide. Las medidas se han evaluado con un horizonte temporal de un año y, para su cálculo, se ha comparado el impacto o beneficio total que generarían respecto a la inversión requerida, con un resultado final que ofrece distintos tipos de retornos, entre los que se contemplan retornos tangibles e intangibles. En el análisis realizado por el Proyecto SROI-AR, el 21% de los retornos son tangibles mientras que el 79% se encuentra en el marco de los intangibles, es decir, un retorno en términos de calidad de vida y bienestar del paciente como consecuencia de la mejora de su estado físico y emocional.