Un avión privado procedente de Amsterdam sufrió ayer un accodente al aterrizar en el aeropuerto de Alicante-Elche y se salió de la pista unos minutos antes de las dos de la tarde. Aunque fuentes policiales indicaron inicialmente que cuatro personas habían resultado heridas de carácter leve, fuentes de la Guardia Civil y de Aena aseguraron después que en el avión sólo viajaban dos personas y resultaron ilesas.

Entre las primeras hipótesis sobre las causas del accidente se han barajado un reventón en una rueda al realizar la maniobra de aterrizaje o un fallo en los frenos. El aeropuerto activó el protocolo de seguridad y estuvo cerrado hasta las 17.40 horas. La pequeña aernoave se salió de la pista y quedó invadiendo parcialmente la misma. Con la ayuda de una gran grúa, los servicios de emergencias trabajaron durante varias horas en el lento proceso de la retirada de la aeronave. Veintiocho vuelos fueron desviados a Valencia (más de una decena), Murcia, Barcelona e Ibiza. Asimismo, nueve vuelos fueron cancelados al no poder despegar desde El Altet.

El cierre del tráfico aéreo soprendió a pasajeros que ya estaban embarcados y tuvieron que ser desembarcados hasta que se autorizara de nuevo el aterrizaje y despegue de aviones. Un pasajero que tenía previsto que su vuelo saliera a Palma de Mallorca a las 16.05 horas explicó a Efe que el interior del aeropuerto estaba «a reventar de personas esperando con la inquietud de no saber cuándo se va a poder volar». «Todos los vuelos están con retrasos y tal es la afluencia que muchos están sentados en el suelo, con calor», explicó este viajero.