La eliminación del cuello de botella entre Vandellòs y Tarragona es el principal problema de infraestructura del corredor mediterráneo, pero no el único. Los tiempos de viaje para los trenes con menos paradas mejorarían aún más si se pudiera ir en alta velocidad de Alicante a València, pero eso no será posible al menos hasta 2021, según fuentes de Adif. El gestor ferroviario recuerda que la transformación a ancho internacional del tramo La Encina-Xàtiva -y, por tanto, que se pueda utilizar la línea de alta velocidad entre Alicante y la pedanía villenera- está supeditada a que se termine el trazado alternativo en ancho ibérico, que no es otro que el que se utilizaba hasta 1997 y que entonces se desmanteló.

Estas obras están avanzando muy lentamente, aunque el pasado mes de mayo se puso en servicio un primer tramo entre Xàtiva y Moixent. Asimismo, entre Xàtiva y València, la infraestructura está muy avanzada, pero los trabajos de instalación de la catenaria están en estos momentos suspendidos, a falta de disponer de todas las instalaciones de seguridad necesarias. Por otra parte, entre València y Castelló comenzará en breve la instalación del tercer carril en la segunda vía. Desde allí hasta Vandellòs, como publicó recientemente este periódico, se utilizará la plataforma actual, preparada, eso sí, para que los trenes circulen a una velocidad máxima de 220 kilómetros por hora.