¿Es necesario gastar 2.600 millones de euros de las maltrechas arcas públicas en la red arterial ferroviaria de València para construir una estación central que supera los 800 millones de euros? No, a juicio del ingeniero de caminos, Joan Olmos, que ayer presentó su alternativa al túnel pasante de València en las segundas Jornadas estatales de defensa del ferrocarril, que se clausura hoy en el centre cultural la Petxina. El túnel pasante atravesaría la ciudad por l'Eixample para acabar con la Estación del Nord en fondo de saco y permitir, en el futuro, a los trenes de alta velocidad y las cercanías atravesar la ciudad por el subsuelo. Pero est diseño de la red arterial ferroviaria de València «supone un elevado coste».

El ingeniero explicó su propuesta adelantada en las páginas de Levante-EMV que consiste en eludir el túnel pasante por el subsuelo de València para ejecutar «una circunvalación ferroviaria» por donde se quiere ampliar el bypass de València. «La circunvalación ferroviaria sólo ocuparía 13 metros de ancho y permitiría transportar 400 trenes al día, pero el lobby constructor quiere duplicar el bypass carretero», defendió Olmos. En este nuevo esquema, la Estación del Norte seguiría siendo el referente para las Cercanías, con el canal de acceso soterrado. Y la nueva Estación Central intermodal (ferrocarril, autobús y metro) se podría construir en la Font de Sant Lluís a imagen y semejanza de la ejecutada en Montepellier: «una estación puente de bajo coste, 135 millones de euros».

Errores de planificación urbana

La ubicación en el entorno de la Font de Sant Lluis permitiría resolver la falta de transporte público en el entorno del hospital La Fe, planificado en el barrio de Malilla «sin previsión de ningún tipo de transporte público». Un grave error de planificación, a juicio del ingeniero de caminos, como el que se cometió al «diseñar la Ciudad Administrativa 9 d'Octubre o los campus de Tarongers tanto de la Politécnica como de la Universitat».