El progresivo envejecimiento demográfico sumado al descenso de la natalidad, provocará que en 2033 el saldo vegetativo (nacimientos menos defunciones) se duplique negativamente. Según las proyecciones de población 2018-2033 del Portal Estadístico de la Generalitat Valenciana, en 2018 el saldo vegetativo del territorio valenciano fue de -5.476 personas, mientras que en 2033 la Comunitat presentará un saldo de -10.864. En la misma línea, las predicciones estiman que en 2033 el 25,41 % de la población tendrá 65 años o más.

Joan Carles Membrado, profesor de Geografía en la Universitat de València, asegura que «es una situación muy complicada y puede suponer un grave problema para las pensiones», puesto que «una de cada cuatro personas sería jubilada. El experto explica que el incremento del saldo vegetativo negativo está relacionado, entre otros motivos, con la incorporación de la mujer al trabajo, ya que «se retrasa la edad en la que se tienen hijos y el número de niños por pareja se reduce a uno o dos».

«Si de alguna forma se puede mitigar el envejecimiento, esta es introduciendo población nueva migrante», comenta el profesor. Membrado asegura que las personas jóvenes migrantes «suelen tener más hijos por pareja» y esto «podría compensar la situación, ya que se trataría de nueva mano de obra que cotiza».

Las previsiones indican que el saldo migratorio será positivo durante el período proyectado y que será la principal causa de crecimiento de la población, principalmente en las provincias de Alicante y Valencia. De este modo, en 2033 se estima que la Comunitat Valenciana tenga 5.212.537 habitantes, 266.304 más de los que tenía en 2018, lo que supondrá un crecimiento medio anual del 0,35 %. La provincia en la que se observa el mayor incremento demográfico es Alicante, que, según las predicciones, en catorce años superaría los dos millones de habitantes (191.701 más de los que tenía en 2018). Valencia también aumentará la población, pero en menor medida, ya que contará con 74.793 personas más. En cambio, Castelló la mantendrá prácticamente constante (se estima que pierda 182 habitantes).

Para explicar el crecimiento en las diferentes zonas del territorio valenciano, el profesor de geográfia apunta, como uno de los principales factores, a «la concentración allí dodonde se encuentran industrias y servicios», es decir, València, Alicante y sus alrededores.

Más población en la Marina

Las comarcas que mayor incremento poblacional registrarán hasta 2033 serán la Marina Alta, la Marina Baixa y el Baix Segura, y no precisamente por la concentración industrial, sino por la migración de jubilados y prejubilados.

El mayor crecimiento se apreciaría en esta zona debido a «la gran cantidad de migrantes del norte de Europa -sobre todo ingleses- que vienen a residir para disfrutar del clima mediterráneo en la última etapa de su vida, así como a los migrantes que acuden para prestar servicios a estas personas».

El experto en Geografía asegura que, en este contexto, el mayor número de inmigrantes que vienen a disfrutar de su vejez provienen de Reino Unido, si bien es cierto, cada vez vienen más los rusos y escandinavos. «Esto respondería a por qué en algunos pueblos de la costa alicantina, como por ejemplo Calp, alrededor del 50 % de la población sea extranjera», explica. Por otro lado, quienes vienen a satisfacer las necesidades de los inmigrantes jubilados (a trabajar como cuidadores, camareros...) son sobre todo marroquíes, rumanos y sudamericanos.

El profesor de la UV comenta que «las comarcas del interior centro y norte, que actualmente son las más despobladas, lo tendrán difícil para sobrevivir si no hay una atracción de migración que sustituya a las personas que ya no están en edad de trabajar».