El Proyecto Hombre alerta del «aumento preocupante» del consumo de cannabinoides sintéticos en jóvenes, ya que el 25 % de las personas que atendieron el pasado año había consumido esta nueva droga, que provoca un «deterioro rápido» que recuerda al provocado por la heroína. Así lo advirtió ayer en una rueda de prensa la Fundación Arzobispo Miguel Roca-Proyecto Hombre Valencia, que también constata la «ausencia generalizada» en la sociedad de percepción de riesgo del impacto del abuso de sustancias como el alcohol y el cannabis o del acceso a juegos por internet o casas de apuestas.

El director de Proyecto Hombre Valencia, Vicent Andrés Martínez, presentó la memoria de 2018, año en el que 1.392 personas demandaron atención y/o asesoramiento e iniciaron tratamiento un total de 859 personas y 574 familias. Destacó el «deterioro brutal» que provoca el cannabis sintético, una droga que se fuma y suele venderse junto a los centros de menores o por internet en bolsitas que contienen la hierba rociada con una sustancia química, a un precio de unos cinco euros. Martínez destacó que al tratarse de un «fenómeno incipiente» los programas de intervención «no están preparados para un consumo tan problemático» como el de esta «droga alegal» que, de momento, no está en el listado de sustancias ilegales.

En la población adolescente, Proyecto Hombre también ha apreciado un «aumento considerable y preocupante» en el numero de personas asistidas a causa de adicciones a tecnologías como el móvil, internet, redes sociales, juegos en línea o videojuegos, así como a las apuestas deportivas. Los responsables de Proyecto Hombre denuncian que la publicidad de las apuestas deportivas «sigue sin control» y es necesario «regular y restringir el acceso» a las mismas, especialmente a los menores de edad. Además, critican las listas de espera que hay para acceder a tratamientos y reclaman la necesidad de revisar y reforzar el sistema valenciano de atención a las adicciones y un liderazgo político para incrementar la prevención y la atención.