El matemático italiano Alfio Quarteroni lidera el comité científico del Congreso Internacional de Matemática Industrial y Aplicada (ICIAM 2019) que reúne durante esta semana en València a 4.000 matemáticos de más de 100 países. Es un referente mundial de la matemática industrial, pues sus modelos matemáticos le hicieron ganar la Copa de América al velero Alinghi en dos ocasiones (2003 y 2007) al permitir diseñar los barcos más veloces. Ahora, como investigador principal del proyecto europeo iHEART para simular el corazón humano, abre nuevas vías de ataque contra las enfermedades cardiovasculares que provocan casi la mitad de muertes en Europa y EE UU.

El uso de modelos matemáticos en la medicina personalizada, según Quarteroni, «puede ayudar a los médicos desde que obtienen imágenes a través de un TAC, una resonancia magnética o una radiografía». «Los médicos hacen el diagnóstico y los matemáticos ayudan en las intervenciones quirúrgicas», añade.

«Las matemáticas pueden proporcionar información cuantitativa de la que rara vez se dispone a nivel clínico, y es además algo no invasivo y significa un ahorro de tiempo y dinero», recalca el investigador transalpino. «Ya estamos ayudando a curar el corazón con las matemáticas», añade Quarteroni. Así, incide en que los modelos matemáticos pueden ser claves a la hora de colocar un estent con el fin de reabrir una arteria obstruida e incluso en una operación de baipás coronario.

Simulación de escenarios

«Todas estas intervenciones se basan en análisis cuantitativos de presión, caudal y turbulencia del flujo sanguíneo, por lo que los modelos matemáticos pueden ayudar a los médicos a explorar los distintos escenarios posibles y decidir la intervención quirúrgica a realizar en base a ecuaciones».

En los problemas de fibrilación y taquicardias las operaciones son largas y complicadas, pues hay que quemar parte del tejido del corazón. Quarteroni también explica que hay modelos matemáticos que pueden ayudar a delimitar con precisión la zona a actuar, «con lo que conseguimos intervenciones quirúrgicas más rápidas y eficaces».

El presidente del Comité Organizador del ICIAM 2019 y catedrático de Análisis Matemático de la Universidad de Sevilla, Tomas Chacón, resalta que las contribuciones de Quarteroni ayudan a los médicos a determinar «cuál es el ángulo óptimo en un baipás coronario, algo que depende de la anatomía de cada paciente, con lo que hace realidad la medicina personalizada». Las matemáticas, añade, también «contribuyen a mejorar la supervivencia de los pacientes con cáncer al ayudar a fijar con precisión las dosis terapéuticas».