Siete funcionarios del centro penitenciario de Picassent resultaron heridos leves al reducir a un interno que se «atrincheró» en una celda y les amenazó con partes metálicas y cristales arrancados de la ventana.
Según informaron fuentes de Acaip, UGT y la Asociación de Trabajadores Penitenciarios «Tu abandono me puede matar», el presunto agresor es un preso clasificado de primer grado, «los más peligrosos del sistema penitenciario español», y tiene numerosos antecedentes violentos y de incidentes en otras prisiones.
Los hechos se produjeron la noche del sábado al domingo pasados cuando el interno, según las fuentes, arrancó el grifo de su celda del módulo 28 de la Unidad de Preventivos y lo utilizó como palanca para arrancar de cuajo la ventana de su celda y los junquillos metálicos de la misma, rompiendo el cristal.
Tras inundar la celda se parapetó con los cristales en la mano y los junquillos metálicos a modo de espada al tiempo que amenazaba de muerte a los funcionarios.
Según Acaip y UGT, fue necesaria la intervención de «numerosos funcionarios de servicio en otros módulos» para conseguir reducir al interno y a consecuencia de los hechos varios de ellos «resultaron con lesiones de diversa gravedad que necesitaron atención médica».
Fuentes de Instituciones Penitenciarias informaron que la actuación de los funcionarios «fue impecable», ya que el preso estaba amenazándolos a través del interfono, trataron de tranquilizarlo y lo pusieron en una celda de aislamiento. Esta celda, según estas fuentes, fue inundada por el interno, que sacó varillas de la ventana y empezó a gritar, por lo que varios funcionarios entraron en la misma con un equipo de intervención.
