Oxfam, Amnistía Internacional, CEAR y la Red Española de Inmigración son algunas de las ONG que reclamaron ayer a España y a la UE que lleguen a un acuerdo para la acogida de los 121 migrantes rescatados en aguas del Mediterráneo Central por el buque de rescate Open Arms. También se unió al llamamiento la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra. Mientras, el Gobierno en funciones mantuvo inamovible la postura que viene defendiendo desde que el alcalde de Valencia Joan Ribó ofreciera la ciudad como destino de acogida de las personas que ayer pasaron su sexta noche en alta mar e insistió: «Es responsabilidad de la Unión Europea (UE)».

«España es frontera de la UE, pero es responsabilidad de la UE en su conjunto y queremos que sea consciente de que es su responsabilidad», reiteró ayer la portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá, ante las preguntas sobre la intención del Gobierno de permitir atracar en España al barco, igual que hizo con el Aquarius. El secretario de Organización del PSOE y ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, ya apuntó el lunes en esa dirección: «No puede ser que España sea el único puerto seguro», afirmó. El Gobierno quiere que «la UE sienta la política migratoria como propia» y remarca que no es una cuestión «voluntarista» sino de política de la Comisión Europea.

Oltra, con las ONG

Oltra, por su parte, reprochó que no sea el Gobierno quien lleve la voz cantante. En respuesta a Ábalos, aseguró que el socialista «dijo que se ponía en manos de la UE y la UE pide un puerto seguro». Ante esto, la «cuestión» para la vicepresidenta es «plantearse si todavía podemos llamarnos humanos» o «girar la vista mientras familias se ahogan en el Mediterráneo».

Para las ONG urge ese acuerdo y demandan al Gobierno en funciones su intermediación. Representantes de Amnistía Internacional, Oxfam Intermón, la Red de Inmigración y la Comisión Española de Ayuda al Refugiado coincidieron en reclamar al Ejecutivo en funciones una actitud proactiva ante la situación de emergencia que viven estas personas.

Otros gobiernos autonómicos además del valenciano insistieron ayer en su voluntad de colaborar. Es el caso del vasco, el catalán y el extremeño.