Ninguno de los tres altos cargos de la Generalitat que provienen de Ontinyent ha recibido invitación para asistir a las fiestas de Moros y Cristianos. El olvido no parece casual y evidencia las heridas que siguen abiertas al año de que la operación Alquería segara la carrera de Jorge Rodríguez. Tal como publicó este diario, las fiestas de Ontinyent y en especial, la «Entrà» que se celebra hoy, han generado un dilema en las filas socialistas. Frente al desembarco de cargos de otros años, la asistencia a esta fiesta ha generado un problema ya que existen dos posturas contrarias dentro del PSPV: quienes piensan que hay que evitar una asistencia masiva y quienes piensan que debe haber normalidad.

Al lío interno, se une el hecho de que el Ayuntamiento de Ontinyent ha sido restrictivo a la hora de cursar invitaciones y ha dejado fuera a la secretaria autonómica de Economía, Rebeca Torró, (antaño aliada de Rodríguez y ahora enfrentada), al secretario autonómico de Medio Ambiente, Fran Quesada, y al director general de Tributos, Rafael Beneyto, los tres de Ontinyent. Torró, a quien algunas fuentes acusan de maniobrar para frenar el desembarco socialista, estará como invitada porque asiste por delegación del presidente Puig. Torró es secretaria general del PSPV en Ontinyent, formación que se estrelló ante Rodríguez en las pasadas municipales.