Los vecinos del grupo Lourdes de Castelló vivieron en la tarde ayer, a la hora de la comida, un sobresalto en forma de incendio. Y últimamente están acostumbrados, ya que es el cuarto en el plazo de solo un mes y medio en las inmediaciones de este barrio. Unos fuegos que atribuyen a la acción de un pirómano, por lo que ya se han puesto en contacto con las autoridades para intentar localizar a esta persona.

El incendio se declaró en una nave del camino Sequiota en la que hay un taller, alejado de las viviendas de la zona. Hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones de bomberos del Ayuntamiento de Castelló, así como una patrulla de la Policía Local. Al afectar las llamas a automóviles, el humo negro era visible a varios kilómetros de distancia. El saldo final fue de cinco vehículos quemados; y las llamas incluso se propagaron hasta unos matorrales cercanos, aunque la rápida intervención de los bomberos evitó males mayores.

Se trata del fuego más serio de esta serie, ya que los anteriores habían afectado solo a huertos. Tres de ellos se habían producido en la zona entre el grupo Lourdes y el grupo San Andrés y otro más cerca de la zona de Gran Vía, explica el presidente de la asociación de vecinos, Rafael Serrano. «Además, son incendios que tienen varios focos separados entre sí, por lo que da la impresión de ser provocados», detalla Serrano.

Los vecinos ya han trasladado su preocupación tanto a la Policía Nacional como a la Policía Local, quienes «han creado una pequeña patrulla para inspeccionar este barrio», añade.

Este mismo mes, en la capital de la Plana, se tuvo que desalojar un edificio de cinco viviendas en la calle Pico Almenaras, junto al centro de salud del Barranquet, a consecuencia de un fuego que afecto al segundo piso.

En lo que va del 2019 se han registrado 37 fuegos que han arrasado 20,65 hectáreas, el principal fue el de Sant Mateu, en julio.