Que un niño nazca con pelo donde, en principio, no debería tenerlo, como la espalda es algo habitual. El problema es cuando al bebé empieza a salirle pelo en la cara, en la espalda y en brazos y piernas y no hay explicación. Es por lo que han pasado tres familias de la Comunitat Valenciana y otras catorce de Cantabria y Andalucía después de que sus pequeños hayan estado tomando -en algunos casos incluso durante meses- un crecepelo (minoxidil) en vez del omeprazol que los médicos les pautaron para controlar su reflujo gástrico por un error de envasado del principio activo.

La alerta comenzó tras conocerse los primeros casos en Cantabria en junio. Los padres empezaron el rosario de visitas y fueron los especialistas del hospital de Santander los que dieron la voz de alarma al vincular el omeprazol que estaban tomando los bebés con la inusual crecida de pelo corporal, hipertricosis. Un análisis confirmó que la fórmula magistral que tomaban los pequeños (debían preparársela en farmacia ya que los niños no pueden tomar la presentación normal en pastillas) no contenía omeprazol sino minoxidil, un vasodilatador que se usa como crecepelo.

A partir de ahí la Agencia Española del Medicamento, Aemps, inició una investigación que derivó en una alerta ordenando el pasado 11 de julio la retirada del mercado de los primeros lotes que contenían este principio activo envasado por error y distribuido por una farmacéutica de Málaga, Farma-Química Sur. En la Comunitat Valenciana, según confirmaron ayer fuentes de la Conselleria de Sanidad, las familias fueron advertidas dos días antes de la primera alerta de julio, al mismo tiempo que se inmovilizaba el producto por la inspección a raíz de la investigación que había llevado a cabo la Aemps tras lo sucedido en Cantabria.

El pasado 6 de agosto se lanzó una nueva alerta sanitaria con nuevos lotes (ninguno distribuido en la Comunitat Valenciana) y el ministerio ha tomado la decisión de suspender la actividad de la farmacéutica de Málaga que importó el principio activo desde India. De esta forma, desde la conselleria se descarta la aparición de nuevos casos. Los tres bebés valencianos afectados llevarían cerca de mes y medio sin tomar el falso omeprazol que les habría provocado hipertricosis. Según los dermatólogos, aún debe pasar otro mes y medio para que el vello empiece a caerse y otros tres meses más para que desaparezca completamente.

Miedo a daños permanentes por la hipertricosis

Además de la cuestión estética, ahora el miedo de las familias son los efectos que la ingesta de este fármaco puede tener en los pequeños ya que el minoxidil no se utiliza en niños, según los expertos, ni siquiera en spray o de forma tópica y solo se ha empezado a usar de forma oral y en dosis muy bajas en adultos y en concentraciones del 2 al 5 %.

«No les dimos un crecepelo, les dimos un fármaco, y aunque ahora dicen que en meses estará normal no hay pronóstico porque los usan de cobayas. En sus diagnósticos pone que son un evento centinela», lamentaba ayer Ángela Selles, madre de un pequeño afectado de Granada.

Como ella, otra madre afectada ha recalcado a Efe que la ingesta del falso omeprazol ha hecho que su hijo de algo más de ocho meses haya pasado por dos pediatras, dos endocrinos, un genetista, cardiólogos y un sinfín de especialistas que le han hecho pruebas hepáticas, de coagulación, renales y cardíacas, con el mismo «centinela» final.

En Cantabria, los padres de cuatro niños han presentado ya una denuncia penal contra un laboratorio, empresas importadoras y distribuidoras y dos farmacias después de que se suministrara el crecepelo a sus bebés menores de un año, cuestión por la que la Fiscalía en esa comunidad ha abierto una investigación. Además tanto una farmacia como dos familias andaluzas han adelantado que también tomarán acciones legales por estos casos de hipertricosis.