Ximo Puig expresó ayer su apoyo a los municipios que celebran fiestas de Moros y Cristianos en sus reivindicaciones para modificar la normativa de la pólvora. El presidente de la Generalitat se comprometió a gestionar una entrevista de los representantes de la UNDEF con el Ministerio de Industria, al tiempo que se mostró abierto a reforzar la colaboración del Consell con estos festejos.

El Palau de la Generalitat acogió en la tarde de ayer una reunión de Ximo Puig con la presidenta de la Unión Nacional de Entidades Festeras (UNDEF), Pepa Prats, que acudió acompañada por el vicepresidente y el tesorero de la asociación. El encuentro llegaba tras la polémica suscitada con el incremento del 50% en el precio de la pólvora, lo que está provocando un descenso en la participación de los actos de arcabucería de los Moros y Cristianos.

Según fuentes de Presidencia, en el transcurso de la reunión Puig expresó su apoyo a las reivindicaciones de los festeros no sólo en lo que respecta a la rebaja del precio de la pólvora, sino también en lo relacionado con la modificación de la normativa del explosivo, con el objetivo de eliminar trabas y facilitar la celebración de los actos y la participación. En este sentido, se comprometió a gestionar una entrevista de los representantes festeros con responsables del Ministerio de Industria, que es el que tiene las competencias en la materia.

También ofreció una mayor colaboración y cooperación de la Generalitat con las Fiestas de Moros y Cristianos, sobre la base de que son una de las manifestaciones culturales más singulares e identitarias de la Comunitat Valenciana, a través de la participación en actividades o en algún programa de ayuda.

Pepa Prats, por su parte, salió satisfecha de la reunión, recordando que lo que reclaman los festeros es acabar con el monopolio de la empresa sumnistradora, mejorar las condiciones del trasvase de la pólvora y que los festeros puedan retener más tiempo el explosivo en su poder para evitar duplicidades de repartos.