La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, espera "un escenario más favorable" tras la reunión que mantendrá el president de la Generalitat, Ximo Puig, con la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, el próximo lunes, para tratar sobre las transferencias del Estado a la Comunitat Valenciana.

De esa reunión saldrá "un escenario que se habrá de tener en cuenta, y esperamos que sea un escenario más favorable" para la hoja de ruta de la Generalitat, que dispone de una prórroga para presentar el Plan Económico Financiero (PEF).

Según ha dicho Oltra tras el pleno del Consell, el Gobierno valenciano está trabajando en los tiempos razonables para dar respuesta a esa situación, "sin prisa pero sin pausas".

El conseller de Hacienda, Vicent Soler, afirmó esta semana que de ese plan dependen 250 millones del FLA extraordinario del cuarto trimestre del año y que las entregas a cuenta tendrán lugar antes del 31 de diciembre.

"Para lo que tenga que pasar hay que esperar a la reunión del lunes y, una vez se produzca, podremos valorar la actitud del Gobierno de España", según Oltra, que considera que en estos momentos se necesita "un poco más de silencio y responsabilidad".

La reunión entre Puig y Montero entra en la relación institucional normalizada entre dos gobiernos para conseguir la cooperación en el objetivo del Gobierno valenciano de "hacer políticas para que mejore la vida de la gente", ha agregado.

Oltra ha señalado que no tiene datos para saber si la reunión con Hacienda será "fructuosa", pero que dispone del "soporte de la Constitución", que recoge la necesidad de garantizar la suficiencia financiera.

Cuando se va a una reunión, ha dicho, se va "con actitud de llegar a acuerdos y buscar soluciones", y por eso se espera que haya resultados y "podamos abordar el impacto que la inactividad del Gobierno en funciones está produciendo en todas las Comunidades Autónomas, que es especialmente sangrante en las que tienen una infrafinanciación injustificada, especialmente la valenciana, que es la peor tratada".

Ha vuelto a insistir en que los 730 millones pendientes (450 de las entregas a cuenta y 250 del IVA de 2017) "no son la solución" pero sí "un balón de oxígeno" que necesita la Comunitat en este momento.