El rediseño territorial que palíe y prevenga los efectos de futuras lluvias torrenciales se estudiará en el plan de acción territorial (PAT) de la Vega Baja. Se trata de un documento de planificación a nivel comarcal, que estudia con detalle la organización de un territorio con visión más allá de la perspectiva municipal. Los PAT desarrollan la Estrategia Territorial de la Comunitat Valenciana (ETCV) que marca el crecimiento de los próximos 30 años y está en vigor desde el 13 enero de 2011.

La redacción del PAT de la Vega Baja lo anunció ayer el conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, durante su comparecencia en las Corts para explicar las líneas maestras de su departamento en los próximos cuatro años. Tras mostrar su solidaridad con las víctimas del temporal de lluvia, Arcadi España anunció que «en los próximos meses la conselleria convocará a los alcaldes y alcaldesas de la Vega Baja y de otros municipios afectados por las pasadas inundaciones para promover mejoras de ordenación del territorio y prevenir los efectos adversos de la emergencia climática». El PAT ya tiene un borrador redactado y se licitará en breve la redacción del documento definitivo.

Infraestructura verde

Las intervenciones en la Vega Baja para prevenir los efectos de las riadas son muy complejas, como recordaba el catedrático del departamento de Ingeniería Hidráulica y Medio Ambiente, Juan Marco Segura, en las páginas de Levante-EMV.

Desde la Generalitat se ofrece la aprobación de un Plan Marshall que permita la reconstrucción de la comarca. Pero es un plan en el que quedan descartados proyectos de desvío del cauce del Segura (como se hizo con el Turia en València) sino que se diseña el territorio para crear zonas verdes de desbordamiento o planificar la ampliación de azarbes, entre otras opciones.