La Generalitat empezó ayer a pagar las primeras ayudas directas por valor de 1.500 euros a los afectados por las lluvias torrenciales del pasado mes de septiembre. Unas partidas que tienen como objetivo reponer lo más rápido posible los bienes de primera necesidad dañados por la gota fría que anegó las comarcas de la Vega Baja y la Vall.
Hasta el momento se han registrado 7.285 expedientes para solicitar las ayudas, que supondrán un desembolso de casi 11 millones de euros para la Generalitat, según anunció la consellera de Justicia, Interior y Función Pública, Gabriela Bravo.
La gestión está centralizada en la oficina que se abrió en Orihuela, «aunque hay departamentos y técnicos de la Administración de la Generalitat en todos los ayuntamientos afectados». Además, las ayudas urgentes al alquiler de vivienda en los municipios afectados, cuyo importe global máximo asciende a 500.000 euros, ya pueden solicitarse. El plazo de presentación de solicitudes será de 15 días hábiles desde el pasado día 10.
Por otro lado, la Generalitat Valenciana asumirá la ejecución de las obras de mejora y adecuación a los seis caminos más afectados por la gota fría en Ontinyent, con una inversión que, sólo en estos espacios, «podría llegar al millón de euros, según las primeras estimaciones».
