España podría ser el segundo país del mundo, tras Islandia, en eliminar la hepatitis C, según se ha puesto de manifiesto en una reunión celebrada en València en la que han participado más de 700 expertos de 47 países para trabajar conjuntamente en la eliminación de esta enfermedad.

Los expertos han concluido que la eliminación de este enfermedad "es posible" y para ello es necesario actuar de forma local, aplicando prácticas globales de referencia y, sobre todo, a través de la colaboración de los múltiples agentes interesados.

Manuel Hernández-Guerra, coordinador del SLTC Summit 2019 y médico del departamento de Aparato Digestivo del Hospital Universitario de Canarias en La Laguna (Tenerife), ha destacado que en la actualidad los enfermos de hepatitis C se han convertido en "una prioridad" para las autonomías "con el objetivo de que puedan recibir tratamiento".

Según datos facilitados por la biofarmacéutica Gileadlos, organizadora de la reunión, se estima que más de 71 millones de personas viven con hepatitis C en el mundo, de las cuales unas 250.000 están en España.

La puesta en marcha en enero de 2015 del Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C ha permitido tratar a más de 130.000 pacientes desde 2015 con unas tasas de curación superiores al 95 %.

A juicio de los expertos, el esfuerzo realizado en España permite pensar que podría convertirse en el segundo país del mundo en eliminar esta infección después de Islandia.

"España está entre los 5 primeros países a nivel mundial en cuanto al tratamiento de pacientes con el virus de la hepatitis C y en un futuro no muy lejano se podría conseguir el control epidemiológico de la infección", según Hernández-Guerra.

Enrique Ortega, jefe de la Unidad de Enfermedades Infecciosas y Salud Internacional del Hospital General de Valencia, ha destacado que la Comunitat Valenciana es "pionera en España en abrir el tratamiento de la hepatitis C a cualquier persona infectada, fuera cual fuera el grado de fibrosis, y ha implementado estrategias para la detección del VHC en personas en riesgo y poblaciones vulnerables".

El encuentro también ha servido para definir estrategias futuras para alcanzar el objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la eliminación del VHC para el año 2030.