Cinco lustros cumplen las Microreservas de flora de la Comunitat Valenciana, zonas de reducida extensión donde se encuentran protegidas tanto la flor del área como los sustratos donde ésta crece. Una figura que otros países como Chipre o Bulgaria, y comunidades como Castilla y León o Baleares importaron en su día, tal como recordaba Paula Tuzón en el Jardín Botánico.
La secretaria autonómica de Emergencia Climática destacaba a la Comunitat Valenciana como referencia internacional en conservación de la flora amenazada y ejemplo para otros países europeos como Chipre, Bulgaria, Grecia o Eslovenia y para otras comunidades autónomas como Castilla y León, Castilla-La Mancha o las Islas Baleares.
Tuzón ha resaltado el valor de estas "pequeñas grandes muestras de la biodiversidad valenciana", que ya suman 312 espacios de gran riqueza de flora endémica, y ha agradecido el trabajo desarrollado estos 25 años. Les microrreservas, creadas en el año 1994, abarcan un terreno superior a las 2.000 hectáreas en, al menos, 145 términos municipales de Alicante, Castelló y Valencia. Si continuamos con las cifras, la red de protección especial llega a unas 2.000 especies vegetales; el 56% del total de flora del territorio.
"Aquella idea pionera ha germinado. Esta idea y fructificación tiene que servir de repositorio para desarrollar protocolos de germinación y producción de plantas nativas amenazadas por el cambio climático", ha asegurado la secretaria autonómica evidenciando el impacto del cambio climático sobre la flora autóctona y la necesidad de programas como las microrreservas para garantizar su supervivencia.
El acto, al cual ha asistido el director general de Medio Natural, Fran Quesada, ha contado con las intervenciones del botánico y conservacionista Vernon Heywood, del jefe de la unidad LIFE y Eco-Innovación de la Agencia Europea Easme, Angelo Salsi, y del biólogo Joan Mayol.
El programa de conmemoración continuará hasta el 12 de enero con dos exposiciones en el Jardín Botánico: Protegida Flora. 25 años de microrreservas de flora valenciana, que explica los detalles de esta iniciativa, y Microrreservas desde el aire, que ofrece una nueva perspectiva de las microrreservas a través de fotografías realizadas por drones.
