El Pleno del Consell ha aprobado un convenio de colaboración entre la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y la Federación de Caza de la Comunitat Valenciana en materia de investigación cinegética y de formación de cazadores.

El convenio sustituye al actualmente vigente, suscrito entre ambos organismos en 1994, y por tanto se adapta a una realidad notablemente distinta, en la que fenómenos como el despoblamiento rural, la mayor exigencia social y ética sobre la práctica cinegética y el papel del colectivo frente a problemas como la proliferación de determinadas especies de fauna silvestre, revisten una relevancia remarcable que exige la adopción de un nuevo marco de colaboración.

En este sentido, el convenio se plantea como objetivo avanzar en la gestión ordenada de la actividad cinegética "adecuada a los más altos estándares técnicos sobre la base de la formación, la investigación y el desarrollo científico y tecnológico" en este campo.

La finalidad es difundir los valores ambientales, de respeto al medio ambiente y a la legalidad cinegética, el perfeccionamiento de los mecanismos de técnicos de gestión cinegética, la mejora del hábitat sobre el cual se proyecta la actividad venatoria, la profundización en el estudio de las certificaciones de calidad cinegética, estudio de las diferentes fenologías de la montaña mediterránea y la mejora de la gestión de la caza en beneficio de la protección de especies protegidas.

De acuerdo con el convenio, la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana se compromete, entre otros aspectos, a facilitar la información sobre las especies de fauna cinegética, especies en peligro de extinción y especies amenazadas en general, a efectos de la gestión ordenada, así como colaborar en la recuperación de las mismas y en la conservación del patrimonio genético de nuestras especies cinegéticas y concretamente en cuanto a la perdiz y el conejo.

Igualmente, el convenio recoge en su anexo las líneas de investigación que, al amparo del acuerdo, se consideran prioritarias por ambas partes, y entre las que figuran, entre otras, la investigación y experimentación en materias como la gestión cinegética en terrenos forestales y agrícolas tanto de titularidad pública como privada.

Además, también incluye la creación y mejora de hábitats para las poblaciones de especies silvestres (cinegéticas y no cinegéticas), la prevención y protección frente a los daños a la agricultura y los accidentes de tráfico provocados por especies cinegéticas, con especial incidencia en el ensayo de nuevos métodos de captura que mejoren la selectividad y el bienestar animal, o la sanidad de la fauna salvaje.