Las obras de una nueva autovía que conectará con el aeropuerto de Manises están más cerca. El Consejo de Ministros aprobará este mismo jueves la licitación del contrato de los trabajos para duplicar la calzada de la actual carretera N-220 desde Paterna y el enlace con la V-30 por un importe de 75 millones de euros, según anunció el propio ministro José Luis Ábalos durante la conferencia organizada por la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) y Levante-EMV, en la tarde del pasado lunes.

La nueva infraestructura es reivindicada desde hace muchos años, sobre todo en Paterna, para resolver los atascos y colas que se forman en los enlaces en las horas punta -en las entradas y salidas al polígono industrial Fuente del Jarro- por el «cuello de botella» que se forma entre las dos ciudades al ser la actual carretera nacional de un único carril por sentido a su paso por Manises y en el puente sobre el río Turia. En ella confluyen dos autovías con más carriles (la V-11 que viene desde el enlace con la autovía A-3 y la CV-365 que circunvala Paterna desde su enlace con la CV-35 a la altura de las instalaciones de À punt, en Burjassot).

El proyecto de construcción fue aprobado a finales de abril por parte del ministerio con un presupuesto de ejecución superior a los 94 millones de euros, que ahora se rebajan en casi 20 en la fase de licitación pública. Una cifra más cercana a los 68,3 millones que se estimaban en junio de 2015 cuando el Ministerio de Fomento dio el visto bueno al trazado de la nueva autovía hacia el aeropuerto.

La longitud del tramo es de casi tres kilómetros para doblar la calzada de la carretera N-220 en el tramo comprendido entre el enlace del aeródromo y la conexión con la autovía V-30. Habrá 3 kilómetros más de terceros carriles en esta última. El tramo afectado por la obra soportaba, ya en 2015, un elevado tráfico con una media diaria de unos 50.300 vehículos (casi un 10 % de camiones) con puntas de más de 2.800 vehículos a la hora.

A lo largo del recorrido se remodelan los tres enlaces existentes: el del aeropuerto, la conexión con la ciudad de Manises y el enlace de la autovía V-30 (ver mapa adjunto). El desdoblamiento arranca en el polígono industrial de Manises con la remodelación de los accesos a las terminales de carga y pasajeros del aeropuerto. Para evitar otra barrera física, Fomento opta por ampliar el falso túnel existente en unos 500 metros a su paso por la capital de la cerámica.

En el enlace de conexión con la V-30, en la parte de Paterna, se prevé la construcción de terceros carriles en la autovía, dos en dirección hacia València y otro en la calzada derecha, en sentido a la circunvalación A-7 o by-pass. Se incorpora además la conexión desde la V-30 (sentido norte) hacia la N-220 (sentido Manises), que hoy no existe, lo que supone que actualmente el único acceso al aeropuerto desde la ciudad de Valencia se produzca desde la autovía A-3.

Esta obra es también muy importante al mejorar la accesibilidad al polígono Fuente del Jarro mediante un nuevo acceso a la segunda fase y la construcción de vías colectoras en la N-220 para mejorar la capacidad y seguridad vial del acceso a la primera fase del recinto industrial de Paterna, donde se forman colas en horas punta. Esta era una de las demandas históricas de los empresarios de Asivalco que fueron atendidas por Fomento.

Para salvar el río Turia se construirá un nuevo viaducto de casi 300 metros para la calzada duplicada y la ampliación del existente con un tercer carril. Además, se contemplan cinco pasos superiores, 12 inferiores, cuatro viaductos y el citado falso túnel a su paso por Manises.

También se ha redactado un proyecto de integración paisajística en el que han participado técnicos especializados con un doble objeto: urbanizar la parte superior del túnel, conectando calles de Manises que actualmente están cortadas por la N-220 y creando zonas de juegos, paseos, jardín urbano y carril bici.