La vicepresidenta de la Generalitat y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, ha dado esta mañana en las Corts una retahíla de cifras que, según ha dicho, consolidan el avance del sistema de bienestar en la Comunitat Valenciana desde que gobierna el Pacte del Botànic. Entre los datos que ha puesto sobre la mesa destaca la de los pagos para la aplicación de la ley de Dependencia, cuya nómina mensual se ha ampliado de los 4,5 millones a cerca de 30, siete veces más que en 2015, el último presupuesto que realizó el PP desde el Consell.

Los presupuestos aprobados por el Consell para el departamento de Oltra alcanzan los 1.618 millones de euros, un 5,7% más que en 2019, lo que supone un 93% acumulado desde 2015, prácticamente el doble. La vicepresidenta ha destacado además que el presupuesto incorpora ingresos suficientes para llevarlo a cabo y mantiene el 50% de la financiación del sistema de atención a la dependencia que tiene que sufragar el Estado.

Añade Oltra que la propuesta de presupuestos es coherente, da estabilidad y garantiza las políticas sociales, ambientales y económicas que el Consell inició hace cuatro años, consciente del escenario político de incertidumbre en el Estado y cuando varias autonomías han optado por prorrogar sus presupuestos.

En cambio, los grupos de la oposición han puesto en la diana el aumento del gasto, la inclusión de ingresos "ficiticios" en las cuentas y el crecimiento del número de asesores y altos cargos por parte del Consell.

Pero Oltra responde que la imposibilidad de llegar a acuerdos políticos en Madrid no puede perjudicar a las personas porque los políticos están para solucionar los problemas y facilitar la vida a las personas, no para complicarla.

Ha destacado los datos del último informe de la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales que analiza las evoluciones de los presupuestos en políticas sociales (educación, sanidad y servicios sociales) de todas las autonomías y que destaca que la Comunitat Valenciana es la que más ha crecido la inversión en servicios sociales por habitante, el 82% respecto a 2009.

Sin embargo, el gasto todavía sitúa a los valencianos por debajo de la media en inversión por habitante y año. El año pasado, la media era de 283€, mientras que en la Comunitat Valenciana fue de 243 (39 euros más bajo). Pero si nos remontamos a 2015, mientras que la media española era de 239€, la de la Comunidad Valenciana era de 169€ (70€ de diferencia).