Reciclados Palancia Belcaire (RPB), empresa castellonense del grupo Mosaiq, ha ejecutado, con el apoyo de la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), un proyecto de I+D+i con el objeto de fabricar bioplásticos y productos biodegradables a partir de residuos urbanos.

A través de esta iniciativa, bautizada como Biolac, se ha definido una estrategia para obtener ácido láctico mediante la fermentación de desechos. Este compuesto químico es clave para sintetizar ácido poliláctico, conocido como PLA (por sus siglas en inglés), un biopolímero con el que es posible producir bioplásticos y recubrimientos poliméricos biodegradables a un coste menor que otras opciones disponibles en el mercado.

En los últimos años, la demanda global de ácido láctico está experimentando, además, un rápido crecimiento gracias a sus diversas aplicaciones alimentarias, farmacéuticas, cosméticas y también industriales

La Agència ha contribuido al proyecto con 70.000 euros en el marco de sus ayudas a la consolidación de la cadena de valor empresarial correspondiente al ejercicio pasado, un programa que, como todos los de la AVI, requiere de la participación de varios agentes del sistema valenciano de innovación.

En este caso, RPB ha realizado los trabajos en cooperación con el centro tecnológico Ainia, que ha aportado sus conocimientos y experiencia en torno al desarrollo de biorrefinerías, y particularmente en la producción sostenible de ácidos carboxílicos como compuestos precursores de biopolímeros o productos químicos de base biológica.

Durante el desarrollo del proyecto, Ainia ha realizado ensayos de laboratorio que han servido de base para estudiar las diferentes alternativas y definir la estrategia de metafermentación más favorable, dado que las estructuras químicas y propiedades (para sustituir al término isómero) de ácido láctico que se obtienen en este proceso pueden variar en función de qué especie bacteriana o consorcio microbiano que se utilice.

Además, el centro tecnológico también ha prestado asesoramiento a los técnicos de RPB en el diseño y ejecución del prototipo del proyecto, que se ha probado en la planta de tratamiento de residuos de RPB en el municipio de Algimia de Alfara.

Alternativa sostenible

Se trata, en cualquier caso, de un punto de partida porque en el futuro muchos tratamientos tradicionales para los biorresiduos como el compostaje o la biometanización serán sustituidos o complementados con bioproductos como el ácido poliláctico. Alineado con los principios de desarrollo sostenible y de la economía circular, Biolac explota el concepto de biorrefinería para fabricar bioproductos utilizando residuos como materia prima.

El proyecto responde, además, a los retos y soluciones que ha identificado el Comité Estratégico de Innovación Especializado (CEIE) en economía circular de la AVI. En su informe de conclusiones, este equipo multidisciplinar, en el que participan representantes de la comunidad científica, los institutos tecnológicos y el empresariado, considera prioritario focalizar la innovación en el desarrollo de envases más sostenibles fabricados con nuevos polímeros más rápidamente biodegradables.