Un total de diez centros educativos de la Comunitat Valenciana ya pueden conocer los niveles de contaminación atmosférica de su entorno y trabajan en propuestas de concienciación y mejora de la calidad del aire gracias a la celebración de la segunda edición del programa sobre contaminación atmosférica 'Veo el Aire que respiro en mi centro Educativo'.

La iniciativa de innovación social 'VÉOLO' impulsa mediante este programa educativo la formación del profesorado y alumnado sobre contaminación atmosférica urbana para concienciar a las nuevas generaciones sobre este problema e impulsar actuaciones de mejora de la calidad del aire.

Según han informado los impulsores de esta iniciativa, el programa se caracteriza por la instalación de medidores de contaminación atmosférica en los centros educativos valencianos.

Estos medidores están conectados a unas bombillas indicadoras que cambian de color en función de la concentración de contaminantes, pasando del color azul (buena calidad del aire) a verde (calidad razonable), amarillo (calidad moderada), naranja (calidad pobre) o rojo (calidad del aire muy pobre).

Estos dispositivos proporcionados por VÉOLO permiten al profesorado y alumnado consultar el nivel de contaminación atmosférica en tiempo real en el entorno de su centro educativo y conocer los niveles de los principales contaminantes procedentes del tráfico rodado urbano como es el material particulado (PM).

Este programa se incluye en la oferta de formación del profesorado de centros educativos del Cefire CTEM de la Conselleria d'Educació, Investigació, Cultura i Esport por segundo año consecutivo.

Durante el pasado curso escolar, un total de 13 centros educativos de la Comunitat Valenciana participaron ya en este proyecto. Actualmente, está en curso la segunda edición del curso y debido a la buena acogida de las experiencias anteriores ya está programada una nueva edición cuyo periodo de inscripción se abrirá a principios de diciembre 2019.

Durante el actual curso escolar los centros IES Enric Valor (Picanya), IES Alfonso XIII (Vall d'Alba), IES Serpis (Valencia), IES Jordi de Sant Jordi (Valencia), CEIP Les Palmeres (Canet d'en Bereguer), CEIP Sant Isidre (Valencia), IES L'Eliana, (L'Eliana), IES Ramón Llull (Valencia), IES Alpuente (Alpuente) e IES Camp de Turia (Lliria) participan en esta experiencia.

Cada centro establece su propio proyecto de mejora de la calidad del aire, que es diseñado por sus profesores y alumnos con la tutoría de profesionales en contaminación atmosférica e innovación social.

Determinar y establecer las franjas horarias con mejor calidad del aire para practicar deporte, conocer el impacto sobre la salud de la contaminación atmosférica o comprobar si los niveles de contaminación aumentan en el momento de entrada y salida del alumnado por el mayor volumen de tráfico en el entorno del centro educativo son algunos de los proyectos elegidos este año.

VÉOLO ha desarrollado esta campaña de actividades formativas en centros educativos para la divulgación social de estrategias que pueden aplicarse fácilmente a nuestro día a día. Su objetivo es mejorar nuestro conocimiento ante los efectos perjudiciales en la salud de la contaminación atmosférica y cómo prevenirlos.

Implicar a las nuevas generaciones

Con ello se pretende formar e implicar a las nuevas generaciones en los problemas medioambientales de su entorno y en el desarrollo de soluciones que beneficien a la comunidad, ya que ellos serán en el futuro los protagonistas del cambio social.

Esta iniciativa se enmarca dentro de VÉOLO, un proyecto de innovación social cuyo objetivo es mejorar la calidad del aire en las ciudades a través de la información, la formación y la implicación de las personas. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, cada año se registran en España más de 24.000 muertes prematuras por afecciones derivadas del aire contaminado.

El objetivo primordial de VÉOLO no es sólo ofrecer datos de los niveles de contaminación atmosférica, sino que busca formar a la ciudadanía para que sepa interpretarlos y actuar sobre ellos, ya sea adoptando las medidas preventivas para proteger a las personas más vulnerables ante sus efectos negativos sobre la salud (primordialmente pacientes con enfermedades respiratorias o cardiorespiratorias), así como sumándolos al compromiso de reducir sus niveles de emisión para lograr una ciudad más responsable y comprometida con el desarrollo sostenible.