La exclusión social se ha reducido intensamente en los últimos cinco años en la Comunitat Valenciana, pero todavía hay un millón de personas que se encuentran en esa situación (el 20,3 % de la población), de las que 472.000 están en situación de exclusión social severa.

Así lo recoge el II informe realizado por la Fundación Foessa (Fomento de Estudios Sociales y Sociología Aplicada) sobre exclusión y desarrollo social en la Comunitat, que revela que la exclusión social se encuentra enquistada en la estructura social, tanto de la Comunitat como del conjunto de España.

El documento, presentado en la sede de Cáritas en València, señala que los principales elementos que afectan a la exclusión en la Comunitat Valenciana son, por este orden, el empleo, la salud y la vivienda, según ha explicado el coordinador del estudio, Guillermo Fernández Maillo.

Analiza también la evolución de los valores de la sociedad, y detecta un aumento del individualismo y una ruptura de los vínculos sociales, así como un incremento del miedo a perder el estatus, lo que lleva a buscar "chivos expiatorios", muchas veces en la inmigración.