La Diputación de Valencia está a punto de completar la elaboración de los ocho primeros planes de actuación municipal que servirán a otros tantos municipios, catalogados como de máximo riesgo de sufrir episodios de gota fría e inundaciones, en la prevención ante estos fenómenos.

La colaboración que la institución provincial ha prestado por iniciativa propia se ha ceñido a aquellas localidades de menos de 5.000 habitantes que están catalogadas como de máximo riesgo de sufrir episodios de gota fría e inundaciones, ha informado la corporación provincial.

Al carecer todo ellos de capacidad técnica para sacar adelante estos planes, la diputación es la que ha decidido enviar a sus técnicos para, tras un análisis exhaustivo sobre el terreno, redactar los informes pertinentes y explicar de manera detallada a cada ayuntamiento cómo se debe actuar ante una emergencia de estas características.

La diputada de Asistencia a Municipios, Amparo Orts, ha destacado que el objetivo de estos planes consiste "en la protección de los vecinos, los bienes y el medio ambiente frente a casos graves de inundaciones".

Ha señalado que después de los episodios de los últimos años, la Diputación de Valencia "ha creído conveniente intervenir por iniciativa propia en aquellas localidades que realmente lo necesitaban".

Los municipios que ya cuentan con su plan de actuación finalizado son Albalat de la Ribera, Benicull de Xúquer, Fortaleny, Riola, Polinya de Xúquer y Bonrepós i Mirambell.

Los cuatro últimos están pendientes de su aprobación, trámite que depende de la Generalitat, y a ellos hay que añadir a Sollana y Benimuslem, que se encuentran actualmente en fase de redacción.

Según ha afirmado la Diputación, Albalat de la Ribera es una de las poblaciones más expuestas a sufrir fenómenos de este tipo ya que, al encontrarse a orillas del río Júcar, se debe controlar en todo momento el nivel del agua durante las lluvias.

Hasta ahora, cada vez que tenía lugar un episodio de gota fría, se actuaba según la experiencia acumulada en ocasiones anteriores. Con el nuevo plan de actuación, el ayuntamiento ya sabe exactamente cómo proceder en estos casos.

El alcalde de Albalat, Felip Hernandis, ha explicado que se trata de "un plan muy sencillo, que se desarrolla en cuatro fases". Una vez se ha comprobado que el nivel del río rebasa un punto de referencia, se avisa a la Acequia Real del Júcar, se colocan unos portones en varias acequias, la policía local corta todos los caminos, y el alcalde activa el plan.

Está previsto que a lo largo del primer semestre de 2020 los ocho municipios cuenten con la aprobación definitiva de estos planes y puedan así estar listos para la época de mayor peligro de inundaciones, han destacado las mismas fuentes.