Si hay un acto que un abogado nunca olvida es el día de la jura o promesa como letrado. Representa el punto de partida de sus carreras, un día en el que se comprometen a respetar el ordenamiento jurídico tras años de estudios, exámenes y desvelos. Es el día en el que inician una nueva etapa en sus vidas.

Cerca de un millar de personas llenaron ayer el auditorio del Palacio de Congresos para asistir al acto organizado por el Ilustre Colegio de Abogados de València (Icav) para dar la bienvenida a los 188 juristas que se han sumado al mercado laboral. «Sois la abogacía del mañana» subrayó Auxiliadora Borja, la primera mujer decana en 260 años de historia de esta institución.

«Vuestro es el futuro, sed valientes para enfrentaros a la vida, comprometeos con las injusticias. Sed sensibles con el que necesita ayuda y firmes en vuestras convicciones y valores», trasladó la decana.

El acto arrancó con todo el auditorio en pie para que los padrinos colocaran a los jurantes las togas que a partir de ahora deberán llevar cada vez que se enfrenten a un juicio. Entre los padrinos estuvieron destacados juristas valencianos como Juan Carlos Navarro, el actual senador del PP Fernando de Rosa -apadrinó a su hijo- o Juan Molpeceres.

A continuación, los 188 jurantes subieron al escenario para jurar o prometer la constitución, en valenciano o castellano, acompañados de sus padrinos, que con este gesto se comprometieron a acompañarles durante su trayectoria profesional para que mantengan intactos los valores y la esencia de la abogacía.

En representación de los nuevos abogados habló Dulmila Córdoba, quien destacó el papel de la mujer en la abogacía y pidió a sus ya colegas de profesión que sean el «orgullo de nuestros predecesores y el ejemplo de futuras generaciones».

«Ser abotagada es estar al día de la realidad, de las leyes y de las decisiones de nuestros tribunales, es estar conectada a lo que pase. Es formación continua, especialización y búsqueda permanente de la excelencia», afirmó Córdoba.

Tras estas palabras, la decana del Icav procedió a la entrega de as Medallas al Mérito en el Servicio de la Abogacía Valenciana y de la Gran Cruz al Mérito en el Servicio a la Abogacía Valenciana, que este año fue concedida al jurista Rafael Bonmatí, anterior decano.

El letrado agradeció el gesto de sus compañeros y sugirió a los jurantes que se impliquen en la vida diaria de la institución. «Os animo a que estéis próximos al colegio porque lo formamos todos, los que lo integramos ahora y la memoria pasada de los que ya no están», recordó Bonmatí.

Con cerca de 12.000 miembros, el Icav es el tercer colegio más importante de España y la organización profesional más importante de la Comunitat Valenciana