La Societat Valenciana d'Ornitologia (SVO) calcula que "se necesitarían 150 años para, al ritmo actual de correcciones, modificar todos los tendidos eléctricos de la Comunitat Valenciana donde anualmente mueren miles de aves".

La entidad critica, a través de un comunicado, que en 2018 "apenas se llevó a cabo la adecuación de unos de 600 apoyos eléctricos en todo el territorio valenciano, una cifra inferior al 1 por ciento de los existentes".

La asociación conservacionista exige "una planificación adecuada para conseguir la total corrección de líneas eléctricas peligrosas en un período de tiempo acorde a la enorme gravedad del problema".

Para ello, propone que el ritmo de corrección de tendidos "se multiplique al menos por 20, para poder alcanzar la solución en un plazo inferior a 10 años".

La Societat Valenciana d'Ornitologia recuerda que tiene entre sus objetivos el estudio, la divulgación y defensa de las aves y de sus hábitats. Esta entidad viene contemplando con preocupación los gravísimos daños medioambientales que están causando los tendidos eléctricos peligrosos sobre la avifauna protegida de la Comunitat Valenciana.

En este sentido, apunta que "las electrocuciones en España son actualmente la principal causa de mortalidad no natural en aves rapaces". Además, la SVO tacha de "lamentable que a día de hoy se sigan instalando nuevas líneas eléctricas en muchas zonas del territorio valenciano sin los elementos antielectrocución necesarios para prevenir estas muertes, alejando incluso cada día más la solución al problema".

Líneas nuevas

En este sentido, recalca "la necesidad de que todas las líneas eléctricas nuevas se instalen ya con protección de avifauna, cumpliendo con la legislación estatal de Industria y de Responsabilidad Medioambiental".

Por último, la SVO reclama "una vez más" a la Generalitat Valenciana que inicie "un cambio sustancial de actitud respecto a las electrocuciones de avifauna, abordando el problema de manera directa, velando por el cumplimiento de la legislación medioambiental vigente".

Igualmente, exige a los titulares de líneas eléctricas "mayor celeridad en adaptar sus tendidos, especialmente a Iberdrola como distribuidora dominante del mercado energético de la Comunitat Valenciana, destinando esfuerzos acordes a los miles de millones de euros de beneficios trimestrales, así como a los supuestos valores de sostenibilidad y protección de la biodiversidad de que se hace gala como potente estrategia de marketing".