H. T., el joven argelino de 16 años que se encontraba interno en el CIE de Zapadores, ha sido puesto en libertad y trasladado este fin de semana a un centro de menores, como ha decretado un juez.
Así lo han confirmado este mediodía fuentes de la campaña CIE NO, por el cierre de los centros, desde donde explican que se había aportado la documentación original del menor, en la que constaba que no había cumplido la mayoría de edad.
El 30 de diciembre, la campaña presentó un escrito ante el juzgado de Instrucción número 3 de València, exponiendo la situación del adolescente y aportando fotocopias de la documentación, además de su partida de nacimiento. El 2 de enero, según apuntan, se registró un escrito en el juzgado de control, pidiendo la inmediata puesta en libertad del menor. Esee mismo día, el juez dictó un auto en el que detallaba que "se comprobaba la autenticidad" de los documentos y se ordenaba el "inmediato traslado" del menor a un centro de menores.
Ayer por la mañana, CIE NO llevó los originales a Zapadores -donde se les negó la entrada el pasado viernes, afirman- y se iniciaron los trámites para el traslado al menor.
Un "modus operandi" que se repite
Desde CIE NO aseguran que se trata de un encierro que H. T. "nunca debería haber padecido", puesto que él ya enseñó la documentación fotocopiada cuando su patera fue interceptada en las costas de Almería, pese a lo que se le trasladó a Zapadores. Además, exigen a las autoridades que se investigue "por qué le asignaron un año de nacimiento que lo convertía en mayor de edad", lo que ya ocurrió en otro caso el pasado mes de julio, con un "modus operandi", según confirman, similar.
"Coinciden modos de actuar de las autoridades", critican, "le asignaron el mismo día y més de nacimiento que figura en las fotocopias que llevaba, pero retrasaron dos años su nacimiento", denuncian.
Según CIE NO, "el encierro de menores de edad es una práctica convertida en habitual, y muchos menores acaban privados de su libertad y deportados, vulnerando toda la normativa de protección de menores". la mayoría en la misma situación que H. T., lamentan, "no corren la misma suerte", lo que atenta contra la legislación española.
