El temporal marítimo dejó ayer cientos de peces y sepias muertos en el passeig de les Goles de El Perellonet al tiempo que ha causado graves daños en la playa de El Recatí, causando destrozos en el mobiliario urbano y en los equipamientos lúdicos de la zona. La fuerza de las olas y la crecida del nivel del mar ha destrozado y desplazado hasta 4 plataformas flotantes desde Sagunt a la playa de este pueblo de València y ha llenado de doradas, «llobarros» y sepias la primera línea del mar, y el Paseo Marítimo que discurre pegado a residenciales como Frentemar II y III, o Heliomar.

Además el fuerte oleaje ha invadido los residenciales y edificios de la primera línea de la playa dejando agua, arena y peces hasta los primeros escalones de las escaleras de acceso a los bloques de apartamentos que hay en El Perellonet desde el carrer Mascaró en adelante, en la fachada marítima, y a lo largo del Passeig de les Goles. Ayer los conserjes y los residentes de todo el año de edificios de apartamentos como el Heliomar o el bloque de Diana, situado este último en el carrer La Sirena, se afanaban en limpiar y sacar el agua. Juan Cuéllar, el conserje del complejo Diana, explicó que desde el domingo «están saliendo peces por todas partes». Mientras atendía a Levante-EMV recogía los peces y los guardaba «en bolsas de basura para tirarlos a los contenedores». Cuéllar alertó de que otras personas, una parte venidas de fuera de la pedanía valenciana, hacían acopio para llevárselos a casa y comérselos o venderlos a terceros. «Eso es un peligro -dijo- porque no sabemos si están en condiciones de ser consumidos», enfatizó.

En general, la lluvia y el viento han causado multitud de pequeños destrozos en el litoral y en las urbanizaciones de El Perellonet con caída de ramas, farolas, persianas, cascotes, barandillas, carteles publicitarios, vallas.

Además, en distintas calles y avenidas hay pequeñas lagunas con dos y tres palmos de agua por las inundaciones -como al final del carrer La Sirena y en el Carrer dels Dofins-, o en otros puntos de la pedanía, frente a la urbanización Estribor o junto a las Villas del Recatí.

El vedel que trabaja en Heliomar, Emilio Lázaro, dijo que en 13 años «nunca he visto una cosa parecida». De hecho confirmó que en este bloque de viviendas «había agua y peces» hasta dentro del edificio. En su opinión, «la crecida del mar» respecto a la playa ha engullido «entre 70 y 80 metros de arena». Ayer le tocó trabajar: «Estaba de vacaciones, pero he tenido que venir, claro». La dueña del restaurante Casa Gema, Gema Iznardo, añadió que en estos días «la luz iba y venía» lo que ha perjudicado a los vecinos y a los negocios de la zona. «No hemos trabajado nada» decía la hostelera que señaló que eso de ver lubinas por las calles «no lo recuerdo yo en 23 años».

Daños en las playas del sur

Las playas del sur de València y la Malva-rosa han resultado muy afectadas. Ayer el Paseo Marítimo seguía cortado al tráfico igual que el Paseo Neptuno por las inundaciones. En cuanto a la urbanización La Casbah, en El Saler, registró un gran socavón en el paseo. La alcaldesa pedánea María Gimeno lamentó «los daños» producidos en el sistema dunar del parque natural de la Devesa y El Saler pero fue prudente: «Hay que esperar para hacer una valoración de los mismos».