Cada vez son más las voces que se suman al debate sobre la necesidad de revisar el actual modelo urbanístico de la costa como medida para evitar que se vuelvan a producir las imágenes de destrucción como las que ha dejado la borrasca Gloria esta semana en la Comunitat Valenciana. Alcaldes como el de Bellreguard, uno del os municipios más afectados por el temporal que se ha atrevido a plantear la reversión de los paseos de primera línea para que el mar recupere su espacio natural, o la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, han puesto sobre la mesa una reflexión a la que se están sumando cada vez más adeptos.
Ayer fue el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien, en su visita a Peñíscola y Benicarló para comprobar los desperfectos causados por la borrasca Gloria, sin hablar de acciones concretas, señaló que la nueva realidad climática, donde los fenómenos como Gloria van a ser cada vez más frecuentes, obligarán a desarrollar «una cultura de prevención en cuanto a la seguridad y planteamiento urbanístico». Una nueva mentalidad en la que estén implicados «desde el Gobierno de España hasta los ayuntamientos, pasando por los propios ciudadanos». El presidente advirtió que «el cambio climático nos va afectar a todos». «En comparación con la Dana, que pudimos prever su impacto, Gloria ha sorprendido por su magnitud y gravedad, debemos ser conscientes de que la realidad climatológica está cambiando y, cada vez, este tipo de fenómenos será más intenso y frecuente», señalaba.
Sánchez, que estuvo acompañado por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig; el alcalde de Peñíscola, Andrés Martínez; la alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles; y el presidente de la Diputación de Castellón, José Martí, entre otras autoridades, prometió que el Gobierno dará «una respuesta coyuntural y rápida para paliar las consecuencias del temporal». Así, desde la administración central, aseguró, «apoyaremos a las instituciones a canalizar y agilizar al máximo las ayudas y, en este sentido, pedimos celeridad a los ayuntamientos en la evaluación de los daños y a los vecinos que paciencia mientras se realizan los trámites necesarios».
En este sentido, Pedro Sánchez recordó que el Plan Nacional de Protección Civil «da un marco para responder a este tipo de fenómenos» y recordó que, cuando hace unos meses tuvo lugar la Dana, se aprobó un decreto ley que permanece abierto y «permitirá acelerar todas las gestiones y ayudas».
Sánchez avanzó que en la conferencia de presidentes autonómicos, que se celebra cada año, el cambio climático y la transición ecológica serán los temas a tratar.
Declaración de zona afectada
Sánchez inició su visita a la Comunitat Valenciana por Peñíscola, donde comprobó el estado de la costa del municipio. Su alcalde, Andrés Martínez, solicitó la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia para que se pueda poner en marcha un decreto que prevea ayudas «cuanto antes» para recuperar el litoral, pero también subsanar los desperfectos en el conjunto histórico artístico de la ciudadela.
Tras visitar la ciudad papal, el presidente del Gobierno se desplazó hasta Benicarló, donde su alcaldesa, Xaro Miralles, le mostró los daños ocasionados por «uno de los mayores temporales de la historia». La primera edila le pidió a Sánchez actuaciones perentorias en la costa norte.
El presidente del Gobierno tuvo palabras de apoyo para todos los afectados y, en especial, para las víctimas mortales que el temporal ha dejado en la Comunitat Valenciana.
