La Federación de Caza de la Comunitat Valenciana reclama a la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica más centros capacitados para realizar la prueba de la triquina en la autonomía. La triquinelosis, también llamada triquinosis o triquiniasis, es una enfermedad parasitaria causada por consumir carne de jabalí con larvas, lo que puede suponer «un grave problema de salud para quien consuma carne infectada». El colectivo de cazadores habla de «pasividad» por parte de Salut Publica, «que no está atajando el problema y alarga una situación que es urgente y prioritaria». Raúl Estebán, su presidente, apunta «a la falta de coordinación entre las conselleries de Agricultura y Sanidad en este asunto».

Las críticas de Esteban surgen tras una última reunión con los responsables autonómicos «por la carencia de centros donde poder llevar las muestras de jabalí para detectar la triquina». «Es un problema que arrastramos desde 2017, cuando se publicó la nueva normativa que determinó que la técnica más fiable para detectar la bacteria era la digestión artificial, que requiere de una mayor estructura que a día de hoy no se puede llevar a cabo sin el apoyo de la Administración». «Apenas existen profesionales preparados ni se cuenta con el instrumental necesario para realizarla», argumenta Esteban.

«Llevamos mucho tiempo detrás de los órganos competentes para encontrar soluciones y no se ha adelantado absolutamente nada; ni hay suficientes centros donde poder analizar las muestras, ni hay facilidades para la formación de los profesionales que la puedan practicar», desgrana Esteban. «Estamos años insistiendo en que se tomen medidas urgentes para facilitar el análisis al cazador de manera segura», asegura. «Nos enfrentamos a un claro riesgo de epidemia, por no imaginar lo que supondría el cierre de fronteras a la industria porcina valenciana, que significaría la ruina económica del sector, amenazado por la Peste Porcina Africana y la tuberculosis», asevera.

Pruebas para comprobar la carne de jabalí

La Federación exige, pues, subvenciones de la conselleria en esas pruebas «para que los futuros consumidores puedan analizar de manera 100 % fiable la carne que van a consumir». Otra de las peticiones es que se den facilidades «para la formación de profesionales mediante recursos y ayudas para que los veterinarios puedan y quieran practicarla».

Desde la conselleria,mientras, y a preguntas de este periódico, se asegura que la administración «cumple con la nueva norma europea que obliga a realizar una prueba de digestión, que implica dejar partes del músculo en proceso de digestión con enzimas para después visualizar las larvas liberadas». Incidiendo además que se hace «de forma auditada y de acuerdo a una norma ISO».