El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha reaccionado hoy a las decisiones tomadas ayer en el Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado en Madrid. El anuncio más importante, aumentar dos décimas el objetivo del déficit, "no es un avance suficiente, pero es algo básico", ha dicho Puig tras la primera jornada del seminario de invierno que celebra el Consell en Dénia.
La flexibilización del objetivo del déficit, que pasa del 0 al 0,02%, supone un respiro para las arcas valencianas, asfixiadas por tener que contener el gasto. Puig cree que es positivo el acuerdo alcanzado ayer todo y que mientras no haya un sistema de financiación justo, "la C. Valenciana seguirá discriminada".
Sin embargo, como un paso adelante, la senda propuesta por el gobierno de PSOE y Podemos permite salir a los valencianos de una situación de bloqueo. La relajación del objetivo de déficit supondrá el ingreso de casi 500 millones de euros en la tesorería valenciana que Puig entiende como una medida transitoria hasta el nuevo modelo de financiación.
Además, ha destacado dos medidas que el conseller de Hacienda y titular valenciano en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, Vicent Soler, puso sobre la mesa a la ministra Maria Jesús Montero. Por un lado, el Gobierno se ha comprometido a aumentar la inversión de dependencia en el presupuesto de 2020. Por ley, el Ejecutivo está obligado a abonar el 50 % del gasto en dependencia autonómico y según ha informado Puig, Montero está por la labor de asumirlo.
En segundo lugar, ha aceptado que las entregas a cuenta no se produzcan en función de una determinación arbitraria del gobierno. "Por tanto, haya o no presupuesto habrá entregas a cuenta", aseguró Puig, una medida que alivia los problemas de tesorería de la Generalitat.
Puig, por la vía del diálogo
Puig se desmarcó de sus homólogos socialistas que han criticado con dureza la decisión de Sánchez de no abonar el IVA a las autonomías. García-Page o Lambán se han puesto contra el Gobierno mientras que Puig, aunque ha asegurado que mantendrá la reivindicación, ha descartado ir a los tribunales como amenazan las comunidades gobernadas por el PP.
De hecho, ha asegurado que la mensualidad del IVA que se adeuda no es el principal problema de los valencianos. Algunas comunidades, ha dicho Puig, están convirtiendo esto en un problema, "pero el nuestro es tener una financiación justa y más importante que el IVA, es el FOGA (Fondo de Garantía Asistencial) por el que se nos adeuda más de 500 millones de euros". Puig ha recordado que el FOGA es la atención sanitaria a personas desplazadas, turistas fundamentalmente, cuyo gasto debe acarrear el Estado y no las comunidades.
"No queremos hacer partidismo ni entrar en luchas territoriales, queremos que se resuelva de una vez la financiación autonómica", ha sentenciado Puig. Lo hará, eso sí, "desde el diálogo para que nadie nos marque nuestra hoja de ruta, que la marcamos nosotros, ni cualquier comunidad autónoma ni cualquier partido político".
66 % de los objetivos conseguidos
La vicepreisdenta del Consell, Mónica Oltra, ha dado cuenta del balance de los últimos seis meses desde que se celebrara el anterior seminario de verano, en Montanejos. La también consellera de Igualdad ha señalado que de los 59 objetivos marcados en la agenda, se han cumplido el 66 % de ellos y el resto está previsto ejecutarlos próximamente.
Entre los ya acometidos ha destacado la Agencia Valenciana Antidespoblación así como el Plan Estratégico Avalem Territori o la figura de la asistencia terapéutica infantil.
Oltra ha puesto en valor este sistema de concentración Botánica: las convivencias del Consell se han exportado al Gobierno de España, quien ha copiado la estrategia de comunicación interna y se encuentra durante todo el fin de semana reunido en Toledo con todos los ministros de la coalición de PSOE y Podemos.
