El primer mes de tráfico gratuito en la AP-7 ha superado todas las previsiones de los técnicos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma). De hecho se esperaba que el incremento del tráfico fuera del «30 %» como sucedió en la AP-1 en Burgos, como confirmó el ministro José Luis Ábalos en una entrevista concedida a Levante-EMV y publicada el 28 de diciembre, a tres días del ansiado fin del peaje.

Un porcentaje que ha quedado pulverizado con los incrementos del tráfico del 153 % detectados en el antiguo peaje de Silla; el aumento del 91 % en el de San Juan o el 55 por ciento más en el de Almenara Sagunt. No obstante, los expertos en carreteras consultados por Levante-EMV, advierten que la auténtica intensidad media diaria de vehículos se obtendrá cuando se cumpla el primer año de circulación gratuita sin previo pago.

No obstante, las cifras obtenidas en el primer mes son espectaculares, sobre todo para el tramo de la AP-7 entre València y Alicante. Según los datos facilitados ayer por el Mitma, el tramo de la AP-7 entre ambas capitales se incrementó un 119 % al pasar de los 12.783 vehículos diarios de enero de 2019 que pagaron peaje a los 28.055 vehículos que optaron por la autopista ya gratuita.

La afluencia masiva se registró sobretodo a la altura del peaje de Silla utilizado por 11.530 usuarios en 2019, que aumentaron hasta los 29.174 vehículos diarios en 2020, ya con la autopista liberada.

El segundo punto de la AP-7 con mayor afluencia, según estos primeros datos iniciales, es la AP-7 en San Juan, que ha pasado de cobrar peaje a 14.035 vehículos diarios a registrar un tráfico gratis total de 26.936 usuarios (un 91% más). Unos incrementos que se reflejan, en parte, en la considerable reducción del tráfico en las alternativas gratuitas a la AP-7 hasta el 31 de enero de 2019. Se trata de la A-38 entre Xeresa y Gandia que utilizan un 15 % menos de vehículos, el 30% pesados (de 27.459 vehículos en 2019 a 24.431 en enero 2020).

Un alivio muy similar al que se respira en Ondara donde la N-332 registrado un 24 % menos de tráfico de vehículos pesados y un 26 % de coches, al pasar de los 15.921 vehículos al día en enero de 2019 a «sólo» 11.732 diarios en el primer mes de 2020.

En el tramo entre Tarragona y València, los incrementos han sido menos espectaculares, aunque reflejan similares aumentos en favor de la autopista liberada: un 36 % más de tráfico frente a la caída del 40 % en vías alternativas como la A-7 y la N-340 (ver el gráfico que ilustra esta información).

Desde el Ministerio de Transportes destacaron ayer que «tras 48 años, los 374 km liberados de la AP-7 han supuesto que desde enero, circular por la red de carreteras del Estado sea un 93 % más barato en la Comunitat Valenciana y un 14 % en el caso de Cataluña». A raíz de los primeros datos de tráfico en enero de 2020, Transportes considera que liberar la AP-7 «ha incentivado el uso de la autovía frente al itinerario alternativo», lo que ha supuesto un «ahorro de 400 millones de euros a los usuarios: 300 millones en la Comunitat Valenciana y 100 millones en Cataluña».

Un ahorro que, destacan desde el departamento que dirige José Luis Ábalos, «además repercute positivamente en la seguridad y en las condiciones de circulación de las vías alternativas de la AP-7, donde el tráfico ha disminuido de media un 30 % especialmente en vehículos pesados».