El Ministerio de Transportes y las empresas públicas Renfe y Adif han reaccionado a los desastrosos niveles de puntualidad y cancelaciones de las Cercanías de València y Castelló y ayer detallaron las medidas del plan de choque que aplicarán en breve para mejorar el servicio que usan 16,5 millones de personas usuarias al año.

La medida más inmediata intenta aplacar el malestar de los viajeros. Renfe se compromete a la «devolución exprés» del billete en el caso de que haya retrasos de más de quince minutos o cancelaciones de trenes «por causas imputables a Adif o Renfe», según explicó ayer el secretario de Estado de Transportes, Pedro Saura, tras celebrar la segunda comisión de seguimiento del Plan de Cercanías junto al conseller de Movilidad, Arcadi España.

La devolución exprés comenzará a aplicarse a partir del 1 de abril. Aunque todo depende de la actualización del software de las máquinas de autoventa de billetes, según explicaron desde Movilidad. Si se retrasara esta medida, desde el ministerio aconsejan conservar el billete del viaje «fallido» para poder canjearlo por un nuevo viaje durante el siguiente mes. Este medida que rascará el bolsillo de la empresa pública se aplicará sólo en el núcleo de Cercanías de València-Castelló hasta que se recuperen «los niveles de puntualidad y fiabilidad equiparables a la media nacional: 95% de puntualidad de las Cercanías y cumplimiento del número de frecuencias programadas del 99,0%». De este cataplasma de la devolución exprés para bajar el elevado caldeamiento por el deficiente servicio quedan excluidos causas de fuerza mayor como temporales o interrupciones del servicio por causas ajenas a Renfe o Adif.

Las medidas directas para atajar las elevadas cancelaciones que no han cesado de crecer -sólo en 2019 se suspendió la circulación de 7.593 trenes de los 159.155 previstos- atacarán dos flancos. De una parte se incrementará la plantilla de maquinistas: 17 se incorporarán esta misma semana y otros 19 en el último trimestre. Aunque cabe recordar que los maquinistas deben obtener la habilitación tanto de la nueva infraestructura ferroviaria por la que van a circular como de los trenes que conducirán (en València los de las series o modelos 447 y 592 o los 470 de media distancia, además de los Civia o modelos 463, 464 y 465). Un trámite que puede extenderse entre 60 o 100 días, en función de la experiencia anterior del maquinista.

El otro flanco que atajará Renfe será el de aumentar el personal y medios en los talleres de València. De los cuatro mecánicos ATL (asistencia técnica en línea) que existen actualmente en València Nord (dos por turno) se pasará a ocho. Tres de ellos permanecerán en las cabeceras de líneas de Gandia, Castelló y Xàtiva, para atajar los problemas mecánicos que puedan surgir y que puedan solucionarse. Un cuarto mecánico tendrá movilidad para desplazarse donde puedan surgir averías imprevistas y que puedan solucionarse sin retirar el tren de la circulación.

En el taller de Cercanías de la Font de Sant Lluís se está volviendo a instalar de nuevo un torno para poder tratar las ruedas, una reparación que se realiza cada determinados kilómetros y que, hasta ahora, debía realizarse en talleres de Madrid, según explican fuentes del Ministerio de Transportes.

Renfe y Adif también se comprometen a mejorar la información a los usuarios a bordo de los trenes que puedan sufrir demoras, a través de los seis nuevos canales de Twitter que se crearán para cada una de las seis líneas del núcleo de Cercanías de València y Castelló, además de más personal y más líneas telefónicas de atención al cliente.

Inversión "asegurada"

Más a largo plazo, el Ministerio de Transportes «ya ha licitado en la Comunitat Valenciana en Cercanías actuaciones por valor de 500 millones, de los que 400 millones están asegurados para los próximos dos años», según Pedro Saura. Una cifra que contrasta con los datos ofrecidos por la Cámara de Contratistas que calcula que sólo se han licitado en los últimos dos años «100,4 millones de euros de los cuales 96 millones están en ejecución reciente y 4,3 millones están en fase de redacción de proyectos a muy largo plazo».

Entre los proyectos licitados por un total de 500 millones Pedro Saura incluye los 200 millones del contrato de trenes convocado el año pasado, así como el proyecto de renovación de vía y catenaria en Silla-Cullera (362.825,10 ?), la instalación del bloqueo automático banalizado (BAB) en este mismo tramo (26 millones de euros), el proyecto de duplicación del tramo Cullera-Gandia (1,9 millones), proyecto de renovación de vías Xàtiva-l'Alcúdia (181.500 ?), otro proyecto para el tramo Buñol-Utiel (7,3 millones) y otros tres proyectos en la Xàtiva-Alcoi por 11,5 millones.