El 70 % de jóvenes no se siente identificado con ningún partido. ¿A qué se debe? Jóvenes de PSPV, PP, Cs, Compromís y Podemos intentan responder en un encuentro con este diario en el que surgen otras cuestiones.
Fran López, que lidera Joves Socialistes, cree que la crisis económica de 2008 sumó otra de credibilidad de los partidos por lo que entiende el desencanto juvenil ante la dificultad de acceder a un empleo o a una vivienda desde trabajos precarios. «Se están haciendo políticas desde el Consell y confío que lo hará el Gobierno de España, pero hay que hacer autocrítica».
«Hay una gresca política continua que no lleva a nada y provoca desafección», analiza Cesc Roig, líder de Joves de Bloc-Compromís. La clave, según Roig, está en que los jóvenes se organicen, busquen espacios de construcción colectiva y copien el modelo de las entidades asociativas.
Rocío Segura, asesora de Podemos en las Corts, sitúa el problema en la educación. «No se nos inculca un sentimiento de pertenencia a una comunidad, no existe una conciencia de lo social y por eso hace falta más labor educativa para poder avanzar en valores cívicos y democráticos».
Juan Carlos Caballero, líder de Nuevas Generaciones del PP, opina que la clase política no ha sabido solucionar los problemas de los jóvenes, que ven a diario cómo los políticos «mienten». «Se ha visto esta semana con el caso Ábalos o con Sánchez, que dijo que no pactaría con Podemos e independentistas, eso es peligroso porque pone en peligro la credibilidad de todos».
Rocío Gil, diputada de Cs, cree que los jóvenes se sienten abandonados por los partidos. «Nos preocupa la emancipación, es imposible irse a vivir a solo, lo veo en mis amigas, la mitad vive con sus padres; los jóvenes ven pasar los años y sus problemas persisten».
Gobierno valenciano. Caballero (PP) y Gil (Cs) le ponen un suspenso rotundo al Consell, globalmente y en políticas para jóvenes. «Venían a aportar aire fresco y a solucionar los problemas, pero son los mismos o han empeorado como en agricultura, listas de espera o la situación de los jóvenes, que tienen hoy más paro. El riesgo de pobreza aumenta en mujeres jóvenes en València. Es demoledor, se ha hecho poco o nada», dice Gil.
Segura (Podemos) le pone una nota de 6,5 al Botànic I porque cambiar la estructura heredada del PP no era fácil. «Hicimos 84 leyes para revertir la herencia del PP y veo al Botànic II más asentado, aunque lo más complicado es que la gente note esos cambios».
López (PSPV) dice que la gestión del Consell ha sido positiva. «Veníamos de una época de corrupción y Puig ha levantado la hipoteca reputacional, ha habido una revolución progresista en derechos, sanidad, educación pública o eliminación de copagos».
Cesc Roig sitúa la nota en notable alto, aunque admite que queda mucho por hacer e incluso es crítico cuando afirma que al Consell le falta «mucha determinación» en cuestiones clave para los jóvenes, como, por ejemplo, reclamar a Madrid una renta de emancipación joven. «Pero creo que Compromís tiene muy identificado el problema de los jóvenes y vamos en la buena dirección en temas como regulación de alquiler o buscar otras alternativas de empleo, pero nos faltan muchos recursos».
Financiación autonómica. Caballero (PP) sostiene que el problema de la financiación es de la izquierda porque no sabe reivindicar con la fuerza que lo hacía contra Rajoy. «Usan una doble vara de medir, mientras el PP siempre ha defendido la necesidad de un nuevo modelo». Fran López rebate que con Puig se ha reforzado el consenso social y se ha puesto la financiación en la agenda española. «Hay una concienciación de los valencianos que antes no existía -remarca Cesc Roig- y existe un clamor ahora que es visible, aunque llega con muchos años de retraso», añade el líder de Joves PV.
Segura sostiene que la falta de financiación es un gran problema, pero confía en que el cambio de Gobierno en Madrid conlleve una mejora. Gil (Cs) apunta que Sánchez se ha olvidado de la financiación valenciana para dar más privilegios a Cataluña o País Vasco.
Eutanasia. Es un cuestión con mayoría clara. Solo el PP se desmarca de la despenalización. Segura plantea el caso de una mujer encarcelada por desconectar a su marido y defiende que los actos de amor «no pueden estar penalizados». Gil (Cs) está a favor porque «no hay nada más liberal que alguien decida como quiere morir en una situación de dolor irremediable». PSPV y Compromís la apoyan sin dudas. Caballero (PP) no se posiciona porque cree que el «suicidio asistido es una cortina de humo para salvar a Ábalos».
Diálogo con Cataluña. La izquierda defiende el diálogo por encima de todo porque los políticos están para resolver problemas políticos, aunque López matiza que dentro de la ley. Gil (Cs) dice que hay que aplicar la ley pero concede diálogo siempre dentro de la Constitución. «Estado de Derecho y cumplir la ley», zanja Caballero.
Monarquía o república. López dice que república «siempre», pero remarca que «aceptando que vivimos en una monarquía parlamentaria». Compromís no tiene dudas, prefiere república. Podemos también pero pide votar aunque dé miedo a las elites. Gil prima la monarquía «porque es garantía de los años de paz». «Monarquía sin duda», defiende Caballero.
