La crisis del coronavirus comienza a generar incertidumbres en Italia. El aumento de víctimas mortales hasta un total de seis a lo largo de este lunes no ha hecho más que avivar una sensación de calma tensa en las regiones italianas que ya aplican las medidas de aislamiento que China también impone a millones de ciudadanos desde que se detectaron los primeros casos del COVID-19.

La Comunitat Valenciana, donde no se ha detectado ningún caso positivo ni sospechoso hasta el momento, observa con atención la evolución de los contagios en Italia después de que miles de aficionados valencianistas viajasen hasta Milán como público del caótico partido contra la Atalanta la semana pasada.

De hecho, la Conselleria de Sanidad va a enviar una hoja informativa a los 2.400 aficionados del Valencia Club de Fútbol para informarles sobre qué hacer si empezaran a experimentar síntomas parecidos al coronavirus. La medida de precaución se toma ante la aparición de un nuevo foco del virus detectado el viernes en la zona de Lombardía, al norte de Italia. No obstante, fuentes de la consellería consultadas por este diario han recomendado huir del alarmismo y señalan que la Generalitat no ha recibido ninguna indicación preventiva por parte del Ministerio de Sanidad.

Desde Milán, la youtuber valenciana DianinaXL ha recorrido para Levante-EMV las calles de Milán para conocer de primera mano la situación en una ciudad paralizada tras el aumento de casos del COVID-19 en el norte del país transalpino. En su breve radiografía de la situación desde la ciudad de la moda, que se encuentra asediada por el avance del coronavirus y la ampliación de su radio de acción, la valenciana ha confirmado la preocupación de residentes y turistas ante los posibles contagios.

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Las regiones de Lombardía y el Véneto han suspendido las celebraciones de eventos deportivos, culturales y hasta las clases. Las medidas de contingencia ante posibles contagios han llegado incluso a la Iglesia, que ha cancelado las misas y cerrado templos. Mientras los turistas que visitan la ciudad confirman la presencia de personal que mide la temperatura en aeropuertos y estaciones, los taxistas certifican que el trabajo se ha desplomado en los últimos días como resultado, creen, del miedo a los contagios.

"Está todo cerrado, todo el país bloqueado", explica un vecino de la ciudad cuya hermana es profesora y no trabajará en toda la semana por las restricciones preventivas. Así, las mascarillas se han convertido en el complemento más utilizado por vecinos y extranjeros y comienza a ser difícil encontrarlas en las farmacias.

La doctora Bossi, que trabaja en una farmacia de Milán, admite que el gel desinfectante y las mascarillas son los productos que más se venden. Sin embargo, no todas son útiles en la prevención de nuevos contagios: las que permiten el filtrado de partículas gracias al carbono, además de otras de mayor nivel son las que permiten bloquear el aumento de casos.

Esta youtuber valenciana, que fue a Italia para grabar unos vídeos al tiempo que despertaba la alerta por coronavirus en Italia, explica a este diario que "a unos 30 kilómetros de Milán, de momento, no hay restricciones". Sin embargo, las autoridades sí recomiendan "no salir de casa a partir de las 18 horas". Además, DianinaXL muestra su preocupación por el posible desabastecimiento en los supermercados donde los italianos comienzan a comprar provisiones de productos de primera necesidad como arroz o leche.