Cuando todavía está por decidir si se permite la llegada de hinchas de la Atalanta a Valencia para el partido de Champions League, el próximo 10 de marzo, y después de que el Gobierno central cuestionara el domingo la presencia de tifosi del norte de Italia -también hay cruces de Europa League en Sevilla y Getafe-, el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, reclamó ayer que en las cuestiones referidas al deporte y la epidemia del coronavirus haya «una visión europea» y no una «especie de atomización en la toma de decisiones que finalmente acabe de alguna manera confundiendo a los ciudadanos».

El director del Centro de Coordinación Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, aseguró que veía extraño que se permitiera la llegada a España de 5.000 o 10.000 aficionados italianos mientras que el gobierno de ese país está prohibiendo la celebración de eventos multitudinarios. Ayer, Simón insistía en que pese a la recomendación de no suspender actos masivos, precisó que Sanidad está trabajando con el Ministerio de Deportes y con las organizaciones deportivas internacionales por si hubiese que adoptar medidas ante eventos deportivos. El director del Centro de Coordinación Alertas y Emergencias Sanitarias compareció ayer tras la reunión diaria del Comité de Evaluación y Seguimiento del Coronavirus, que presidió el ministro Salvador Illa. Al parecer serán los gobiernos español e italiano, junto a la UEFA como organizadora, quienes tomen la decisión.

Como informó Levante-EMV, el aeropuerto de València tiene prevista la llegada de diez aviones chárter con motivo del enfrentamiento en Mestalla. Puig manifestó a los medios de comunicación que, en las decisiones sobre esta enfermedad y los acontecimientos deportivos, «hay que trabajar con el máximo rigor posible», y añadió que, en el momento en que las autoridades sanitarias españolas decidan «algún cambio de posición», la Generalitat lo aplicará. Cabe destacar que, de momento, no hay ninguna medida restrictiva frente a la entrada de italianos en el país ni de ninguna otra zona de riesgo, como China o Corea del Sur.

El president afirmó que en estas cuestiones «lo más importante es la seguridad sanitaria de los ciudadanos» y que hay que actuar «sin crear falsos alarmismos, pero también siendo conscientes de que hay que evitar todos los peligros que puedan existir de contagios». Cabe recordar que fue en el partido de ida, en Milán, donde se produjo el contagio de un periodista valenciano que, a su vez, ha provocado, otros contagios entre compañeros y familiares.

Aunque por el momento Sanidad no propone suspender ningún acto, ni siquiera las manifestaciones del 8 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer, se recomienda a las personas con sintomatología respiratoria que no acudan a ningún evento colectivo y usen mascarillas.

La alarma por el coronavirus no sólo afectará al fútbol. El resto de deportes, como el baloncesto, están bajo estricto control o se han suspendido, como sucede en las regiones del norte de Italia afectadas por contagios. En este contexto, este jueves 5 de marzo, el AX Armani Exchange Milan debe jugar contra el Valencia Basket en La Fonteta el partido de Euroliga. La Euroliga ya se ha pronunciado al respecto, remitiéndose a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y en el club dan por hecho que se podrá jugar el partido sin problemas, con normalidad relativa dentro de las circunstancias. De hecho, lo que sí es seguro es que no van a desplazarse los aficionados, sólo los equipos y sometidos a examen, lógicamente. Incluso no es seguro que puedan viajar representantes de medios de comunicación junto al equipo.

Donde sí ha visto afectada la competición continental de baloncesto es en Turquía donde se ha suspendido el partido Darussafaka Tekfen-Segafredo Virtus Bologna de la Eurocup por la decisión del país turco de no permitir el acceso a ninguna persona que haya pasado tiempo en Italia durante las dos semanas anteriores.

El Valencia Basket juega en Lyon

El Valencia Basket visitará hoy en la Euroliga al ASVEL Villeurbanne en un Astroballe que ha visto reducido su aforo para la cita por las medidas que ha tomado el gobierno francés para tratar de contener la expansión del coronavirus. El club francés ha reducido el tope de asistencia hasta los 4.500 espectadores y ha recibido el visto bueno del gobierno de su país para que se pueda disputar el choque, según confirmaron fuentes de la competición, después de que el Ejecutivo francés haya prohibido que se celebren espectáculos que reúnan a más de cinco mil personas en recintos cerrados. Por otra parte, ayer se conoció que el gobierno de Tailandia había decidido «aplazar» la celebración del Gran Premio de Motociclismo de Tailandia que se iba a celebrar el próximo domingo, 22 de marzo, y en el que participan pilotos valencianos.