La armonización de impuestos anunciada por el Gobierno pretende reducir la abismal brecha fiscal que separa a las autonomías a la hora de gravar a los contribuyentes. Las comunidades de Asturias, Cataluña, Comunitat Valenciana y Extremadura son las regiones que mantienen los impuestos más elevados, frente a Andalucía, la Comunidad de Madrid y Murcia, que presentan la fiscalidad más baja. Así se desprende del informe «Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Foral 2020» presentado por el Registro de Asesores Fiscales (REAF) del Consejo General de Economistas (CGE).
El estudio refleja un aumento generalizado de los impuestos en comunidades como Canarias, Cataluña o La Rioja, frente a las bajadas aprobadas en Andalucía o Murcia. En el caso del IRPF, un contribuyente soltero y sin hijos de menos de 65 años, con rentas inferiores a 16.000 euros, pagaría más por este tributo en País Vasco, mientras que donde menos tendría que pagar sería en Madrid y La Rioja. En rentas medias, el IRPF más alto se registra en Cataluña y Navarra, mientras que las rentas de más de 220.000 euros pagarían el mayor montante en Navarra y el menor en Madrid.
Asimismo, en Patrimonio se llega a registrar una diferencia de 418.000 euros en el tributo que tendría que pagar un contribuyente con 15 millones de patrimonio en Extremadura, la región con el impuesto más alto, y Madrid, donde no se paga por dicho tributo. En lo que respecta a Sucesiones y Donaciones, el REAF-CGE explica que se ha establecido una clara competencia territorial a la baja: este año se incrementa en Canarias (suprime la bonificación general del 99,9 % para el cónyuge, ascendientes y descendientes mayores de 21 años), Cataluña y La Rioja (con deducciones del 50 % a partir de 400.000 euros), mientras que Galicia incrementa la reducción para el grupo II de 400.000 ? a otra de un millón de euros.
De esta forma, cogiendo un ejemplo de un contribuyente soltero menor de 30 años que hereda bienes de su padre por valor de 800.000 euros, en Andalucía, Cantabria y Galicia no pagaría nada, mientras que en Asturias abonaría 103.135 euros. Concretamente, en donaciones, en Castilla y León y Extremadura pagaría más de 200.000 euros, frente a la exención total en Cantabria o los apenas 2.000 euros de Madrid o Murcia.
Grandes diferencias
En cuanto al impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (AJD), Baleares sube el tipo del 1,2 % al 1,5 %. En el caso de la transmisión de un inmueble no destinado a vivienda de 450.000 euros, se pagarían 45.000 euros por Transmisiones Patrimoniales en Cantabria, Cataluña, Comunitat Valenciana y Galicia, frente a los 27.000 euros en Madrid y Navarra. Las comunidades autónomas, además, cuentan con 70 impuestos propios en vigor, que solo recaudan un 2,1 % del total de ingresos de las autonomías. El CGE pide una ordenación.
