Camillas atravesadas, unas cintas cogidas por dos caballetes o incluso sillas. Son algunas de las barreras físicas, rudimentarias, que están poniendo en varios centros de salud de la Comunitat Valenciana frente a los mostradores de admisión.

El objetivo es proteger de posibles contagios de coronavirus al personal de administración y garantizar que todas las personas que se acercan a hacer una gestión estén a, al menos, dos metros de los trabajadores, la distancia a la que se considera que como máximo viajan las gotitas de saliva que expulsamos al hablar o toser y que son la vía de transmisión del coronavirus que ya deja 30 contagiados en la Comunitat Valenciana y tres muertos en España.

No hay una instrucción especial desde la Conselleria de Sanidad, pero el poner «barreras» entre la cola de pacientes y el personal de admisión se está generalizando sobre todo en aquellos centros de salud valencianos en los que el mostrador no tiene otras medidas de separación como mamparas que sí se ponen en los nuevos centros (o en los que se reforman) sobre todo para evitar problemas de agresiones.

Y es que los protocolos del Ministerio de Sanidad que dicen cómo abordar a los pacientes con sospecha de coronavirus que entran por la puerta de los ambulatorios no son específicos en esta cuestión y la primera persona que recibe a los pacientes son los administrativos.

«Hay personas que sí avisan que vienen con síntomas compatibles y enseguida se les pone una mascarilla y se les aísla como pone el protocolo, pero hay gente que va al mostrador, interactúa, no dice nada y se va a la sala de urgencias sin avisar», explica Mª Ángeles Medina, presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Svmfyc). Una vez que esos posibles casos sospechosos están «identificados» sí se les está aislando y visitando con las medidas de protección que recomiendan las autoridades sanitarias «que creo que están haciendo bien las cosas», asegura Medina.

Mejor llamar por teléfono

Con todo, la presidenta de la sociedad de médicos de familia insistió en que cualquier persona con síntomas compatibles con la enfermedad que provoca el coronavirus (tos seca, fiebre o dificultada para respirar) y que pudiera haber estado con alguna persona contagiada o haber viajado a zonas de riesgo (China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán o norte de Italia), lo primero que debería hacer antes de ir al centro de salud es llamar al 112 o al teléfono específico habilitado por la Conselleria de Sanidad, 900 300 555 para valorar primero su situación y actuar sin poner en riesgo, en su caso, a más personas. La Conselleria de Sanidad ha puesto en marcha una campaña específica en su web y redes sociales sobre este número de teléfono.

Por su parte, la coordinadora de salud laboral de la sección sanitaria de CC OO, Mª Ángeles Gómez, defendió que se aumentaran las medidas de prevención si los centros de salud así lo consideraban «porque es cierto que no todos tienen separación o mampara y ellos son el primer eslabón y hay que minimizar los riesgos».

Con todo, para la sindicalista era necesario «homogeneizar» medidas de prevención, ya que algunos hospitales como el de Orihuela, con un infectado por el Covid-19, han empezado a pedir que se restrinjan las visitas en el hospital.