¿En la enfermedad de Parkinson queda mucho aún por investigar?

Se han realizado muchos avances en los últimos años y en entender sus causas, pero donde más se ha avanzado es en cómo tratar y paliar la enfermedad en los pacientes. Sin embargo, todavía quedan muchas incógnitas por responder. Como por ejemplo, poder realizar un diagnóstico prematuro de la enfermedad para poder actuar cuanto antes. Siguiendo en esta línea, en el parkinson suelen estudiarse sobre todo los problemas motores y se dejan aparte los cognitivos, como el insomnio o la depresión. En mi opinión, son también importantes y quizá podrían utilizarse como marcador prematuro.

¿Por qué asustan tanto las enfermedades relacionadas con el cerebro?

En mi opinión porque es uno de los órganos más importantes que tenemos y controla muchos procesos en nuestro organismo. Por ello, cuando ocurren enfermedades o problemas que afectan al cerebro no sólo se ve afectado ese órgano sino también nuestro cuerpo. También, desde mi punto de vista, los procesos que ocurren en esta parte del cuerpo humano no son triviales y son difíciles de estudiar. Esto puede provocar que no lleguemos a entender exactamente qué ocurre y siempre solemos temer a aquello que se nos escapa de las manos.

La gente de la calle teme menos a un cáncer que a una dolencia degenerativa del cerebro.

En cualquier caso, ambas enfermedades son difíciles de abordar y es normal que provoquen cierta incomodidad en la gente. Quizá esto ocurre porque la gente no llega a entender que cuando una enfermedad degenerativa se desarrolla, como he comentado antes, no sólo se ve afectado el cerebro, sino que se ven afectados muchos más procesos de nuestro organismo, así como el estado mental del individuo y sus relaciones sociales.

El trabajo de los científicos debería ser el mejor pagado del mundo, por lo que aportan a la humanidad. Pero todo son noticias de precariedad en el mundo de la investigación.

Es un problema a varios niveles que afecta tanto a investigadores más consagrados como a investigadores jóvenes. En mi caso, he tenido suerte porque mi tesis ha sido financiada por el ministerio de Economía y Competitividad y ahora mismo estoy en un laboratorio con un sueldo a final de mes. Pero conozco compañeros que han trabajado gratis en muchos laboratorios. Por supuesto se debería de destinar bastante más dinero de lo que se destina hoy en día a ciencia, porque no sólo se tiene que costear el material, reactivos, etc que de por sí ya es caro; sino que también se tiene que pagar al personal que está realizando esa investigación. A menudo se romantiza mucho la idea de «por amor al arte», en este caso, «por amor a la ciencia». Mucha gente cree que porque te guste la ciencia deberías de conformarte con que te paguen poco o no te paguen. Pero la realidad es que detrás de eso somos personas que invertimos mucho tiempo y esfuerzo y que necesitamos cobrar a final de mes. Por esto mismo ocurre tanto la «fuga de cerebros», y creo que eso es de lo más triste que le puede ocurrir a un país.

Usted ha desarrollado un dispositivo que permite liberar cualquier tipo de sustancia al registrar la actividad eléctrica de una sola neurona. Explique qué importancia tiene eso para el que no sabe de ciencia.

La técnica que realizamos en el laboratorio (que se realiza en muy pocos en el mundo), nos permite registrar la actividad eléctrica de una sola neurona mientras el animal está vivo, con lo que podemos entender cómo se comporta una neurona de manera normal. Sin embargo, es una técnica muy sensible a vibraciones, con lo que las manipulaciones que podemos hacer son pocas. Por ello, en nuestro laboratorio desarrollamos un dispositivo muy pequeño para poder combinar el registro de la actividad eléctrica con la liberación de cualquier tipo de sustancia. Por ejemplo, poder ver cómo se comporta una neurona cuando liberas cerca de ella dopamina. Esto es importante porque hasta ahora este tipo de manipulaciones no se podían hacer con el animal vivo, perdiendo las condiciones fisiológicas normales.

¿El Alzheimer tendrá cura algún día?

El problema de la enfermedad de Alzheimer es que puede tener muchas causas, algunas son hormonales, otras son genéticas, etcétera. Es difícil que a corto plazo se encuentre cura. Ahora mismo los esfuerzos sobre todo se centran en tratar y paliar la enfermedad. Por supuesto tenemos que pensar que se encontrará cura algún día, para ello se investiga.

¿Qué suponen premios como el Talento Joven de Levante-EMV y Bankia?

Una gran sensación de reconocimiento. Hay momentos en el laboratorio donde pierdes un poco la noción del tiempo, porque en mi caso y en el de muchos otros investigadores, los estudios que realizamos son largos y se tarda bastante en ver los resultados. Por lo que, cuando recibes un premio así te hace levantar la cabeza y motivarte para seguir adelante. También creo que este tipo de iniciativas son muy necesarias. Lo mejor de esto ha sido que gracias a presentarme a los premios, la gente de mi pueblo y las personas más cercanas a mí saben lo que hago en el laboratorio y eso siempre es especial.

Muchos jóvenes persiguen ahora estudiar carreras como la de biotecnología ¿Por qué se decidió usted por esta rama?

A mí siempre me ha gustado mucho la ciencia y todo lo relacionado con ella. Mi asignatura favorita en el instituto era biología, y quizá impulsada por esto quise hacer la carrera. Sin embargo, la carrera de biología se me quedaba muy corta en cuanto a aplicaciones y conocí vi la carrera de biotecnología me pareció una buena opción. Estudiando biotecnología, además de aprender los principios básicos y fundamentales de la biología, también estudias sus aplicaciones y sus vertientes. En un mundo en el que cada vez más se pide que la gente sea polivalente creo que este tipo de estudios llaman mucho la atención.