La suspensión de los viajes del programa de Turismo Social del Imserso durante un mes ante la expansión del coronavirus ha caído "como un jarro de agua fría" en la industria turística de la Comunitat Valenciana, según ha reconocido la patronal hotelera Hosbec.

En un comunicado, el sector ha reclamado al Gobierno "detalles concretos y medidas paliativas y compensatorias para las empresas que tengan que cerrar o limitar su actividad".

"A pesar de que desde Hosbec no compartimos la decisión tomada por el Ministerio, entendemos que deben existir suficientes motivos de carácter sanitario que justifique esta decisión", han indicado las mismas fuentes, que no ven con buenos ojos "el todo o nada".

El presidente de Hosbec, Toni Mayor, ha recordado que los hoteles españoles no han sufrido ninguna incidencia de importancia en todo este periodo, especialmente teniendo en cuenta el volumen de turistas españoles e internacionales que se alojan en la planta hotelera que está abierta.

"Nuestros establecimientos son seguros, más si cabe que un domicilio particular, porque se han extremado las medidas de higiene y protocolos de limpieza para evitar precisamente cualquier tipo de incidencia", ha remarcado.

Para la patronal habría sido muy deseable que en el mismo momento en que se ha hecho pública esta medida se hubiera informado a todos los actores del programa de los detalles: a partir de qué fecha comienza la restricción, qué ocurre con los viajeros que están ahora mismo disfrutando de sus vacaciones, y sobre todo, qué medidas de carácter extraordinario se van a poner en marcha para paliar los efectos sobre el sector.

Las medidas que reclama el sector pasan por medidas de carácter laboral, centradas en apoyo a los expedientes de regulación temporal de empleo que tengan que ponerse en marcha, medidas de carácter económico para garantizar la viabilidad financiera de los operadores adjudicatarios o la puesta en marca de líneas ICO específicas para proporcionar tesorería si fuera necesaria, así como medidas de carácter fiscal con aplazamientos de pagos de impuestos, bonificaciones fiscales y supresión de los impuestos que gravan específicamente la actividad hotelera.

La paralización de la actividad turística en poblaciones turísticas (como son Benidorm, Peñíscola o Gandia en la Comunitat Valenciana) "tiene unas repercusiones extraordinarias sobre toda la población y también en la imagen en la imagen internacional de España", han agregado las mismas fuentes.

"El retrovisor internacional es muy importante cuando se toman medidas de este tipo", ha indicado Toni Mayor en referencia al daño colateral que se puede producir en los mercados internacionales: "Estamos seguros que este factor tampoco ha sido tenido en cuenta en esta decisión del Ministerio".

Las cifras del programa en la Comunitat

El programa de vacaciones de Mayores puso en comercialización 180.000 paquetes para la temporada 2019-2020 para la Comunitat Valenciana. En estos momentos Hosbec estima que queda aproximadamente un 65% por ejecutar ya que precisamente en estos días comienza la "temporada alta" del IMSERSO.

"Lo que queda en el aire supone para la Comunitat Valenciana la suspensión de unos 120.000 paquetes, con 1 millón de estancias y una facturación entre 25 y 27 millones de euros. De estos datos, el 80% de la ejecución corresponde a Benidorm, el 10% a Castellón y el 10% restante a Gandía y otras poblaciones de la Costa Blanca", han indicado las mismas fuentes.

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