La Comunitat Valenciana lideró en 2019 la tasa de separaciones y divorcios en España, con 26,7 demandas de disolución matrimonial por cada 10.000 habitantes, frente a la media nacional de 23,3 por cada 10.000 habitantes.

Según el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), a nivel nacional las demandas de separaciones y divorcios descendieron un 1,9 % hasta las 109.567 en 2019, el quinto año consecutivo de bajada de las disoluciones matrimoniales. Se registraron descensos tanto en los divorcios de mutuo acuerdo (62.020, un 0,4 % menos que en 2018) como en los no consensuados (42.826, una caída anual del 3,6 %). Y más descendieron las separaciones contenciosas, un 7,6 % (1.511), y las consensuadas, un 5,4 % (3.210). Asimismo, fue un 25 % menor el número de demandas de nulidad: de 134 de 2018 pasaron a 100 en 2019. La media nacional de demandas de disolución matrimonial por cada 10.000 habitantes fue de 23,3, una media que superan la Comunitat Valenciana (26,7), Baleares (26,5), Canarias (25,7), Andalucía (24,3), Cataluña (24), Asturias (23,7) y Murcia (23,6).

Las regiones donde menos parejas se disuelven son Castilla y León (18,4 por cada 10.000 habitantes), País Vasco (19,7) y Extremadura (20,8). En las restantes comunidades autónomas, las cuotas fueron de 23,3 por cada 10.000 habitantes en Cantabria, de 23,1 en La Rioja, de 22,9 en Castilla-La Mancha, de 22,5 en Aragón, de 21,9 en Galicia, de 21,7 en Navarra y de 21,6 en Madrid.

Subieron las modificaciones de medidas en procesos de separación y divorcio: un 7 % las demandas en casos de consenso hasta las 12.166 y las no consensuadas, un 3,8 % hasta las 34.949. Las guardia, custodia y alimentos de hijos no matrimoniales consensuadas subieron un 2,3 % hasta las 19.716 y las no acordadas, un 0,6 % hasta las 28.634.