El exconseller Juan Cotino ha asegurado que el arzobispo de València en 2006, el cardenal Agustín García-Gasco, fallecido en 2011, era "el que mandaba" en la visita del papa a València y ha negado que recibiera un chaquetón de regalo de la trama Gürtel a cambio de adjudicar contratos al grupo Correa. Cotino ha negado que tuviera relación con Álvaro Pérez El Bigotes, Pablo Crespo o Francisco Correa y ha asegurado que no intervino en la adjudicación de las pantallas del contrato de Canal 9.

Cotino ha declarado este jueves por primera vez en un juicio acusado por corrupción política. Anticorrupción pide para el exdirigente del PP 11 años de prisión por ser el "elemento nuclear" de la visita, pero en su declaración ha sostenido que sólo ayudó a la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias en asuntos relacionados con la seguridad y la coordinación de los voluntarios.

"El arzobispo -García Gasco- era el que mandaba" ha insistido Cotino, quien ha matizado que la Iglesia le pidió ayuda porque había colaborado en este tipo de eventos desde la visita a España de Juan Pablo II en 1982 y contaba con una dilatada experiencia en asuntos de seguridad por los cargos públicos que había ocupado.

"Yo tenía la responsabilidad máxima del voluntariado, pero en nada representaba a la fundación", ha repetido Cotino. El exdirgente del PP ha subrayado que no intervino en la adjudicación de Canal 9 y que de haber sabido que Gürtel estaba detrás hubiese presentado una denuncia en Comisaría.

Sobre la entrega de un chaquetón que aparece en el sumario, Cotino ha respondido que "todos los regalos que recibía los rifábamos entre los funcionarios. Si el chaquetón hubiese llegado, se hubiese rifados como todos los objetos".

El cerebro de la trama Gürtel, Francisco Correa, ha reconocido por primera este jueves en la Audiencia Nacional que se llevó el contrato de las pantallas de la visita del papa a València de 2006 y que utilizó la constructora Teconsa para ganar la adjudicación de Canal 9, que se elevó a 7,4 millones de euros (con IVA) pese a que costó tres.

"En València solo tuvimos siete contratos, ¡menos mal que nos dieron el papa!" ha respondido a preguntas de la Fiscalía Anticorrupción. No obstante, ha negado que en un principio Pedro García, exdirector general de Canal 9, adjudicara el servicio a cambio de una comisión de 500.000 euros o prendas de vestir.

"Este señor no adjudicó a cambio de dinero, lo que he sido es tremendamente generoso, soy un experto del marketing (€) Quién no ha recibido un regalo en España", ha añadido. También ha admitido que con los beneficios que obtuvo de este contrato adquirió la casa de Ibiza, que hoy en día está en ruinas.

Correa ha declarado que conoció a Francisco Camps en la boda de la hija de José María Aznar. "Nos tocó en la misma mesa y me dijo me llevo a Alvarito". A partir de ahí el grupo Correa crea la empresa Orange Market, el brazo de Gürtel en la Comunitat Valenciana, y empieza a trabajar para las campañas de Camps.

El juicio por la trama del papa se ha retomado este jueves después que el tribunal suspendiera la sesión de ayer al ser ingresado de urgencia Correa por una hernia. El acusado se ha recuperado y ha podido declarar este jueves, un interrogatorio que se ha prolongado durante dos horas aproximadamente.

"Pedro García cometió un error que fue adquirir un dinero. Los funcionarios que están aquí acusados son gente honesta y humilde que no los conocíamos de nada", ha dicho Correa.