El día en que la presidenta electa de su partido, Inés Arrimadas, se ponía el traje de centro con el ofrecimiento de colaboración al Gobierno para aprobar unos presupuestos de emergencia nacional, el que que se presume futuro líder autonómico de Ciudadanos, Toni Cantó, lanzaba el discurso más duro contra el Consell desde que comenzó la crisis sanitaria.

Cantó acusó al gobierno valenciano de ocultar la verdad sobre los contagiados por coronavirus, sin aportar ninguna prueba, calificó al Gobierno de España de «amoral» por alentar las movilizaciones del 8 de marzo con el virus en la calle y encendió a la izquierda cuando usó el lema feminista «hermana, yo sí te creo», popularizado en las movilizaciones contra la violencia sexual a raíz de la sentencia de La Manada. Con ello se refería al positivo que unos minutos antes acababa de anunciar la ministra de Igualdad, Irene Montero, que el domingo participó en esa manifestación. «Hermana, yo si te contagio», lanzó.

Fue el momento más tenso del pleno en el que el presidente Puig informaba de la gestión del Consell ante la pandemia. Miembros del ejecutivo, como los vicepresidentes Oltra y Dalmau y algún diputado abandonaron el pleno para no seguir escuchando.

Las caras delataban a muchos diputados de Ciudadanos, que en privado aseguraban después que les había sorprendido el tono tan duro de Cantó. El propio síndic de Ciudadanos trató de salir airoso y en la réplica pidió disculpas al asegurar que se habían malinterpretado sus palabras, aunque mantuvo que el Gobierno prefirió alentar las manifestaciones a frenar la contención del contagio.

Contraste con la «lealtad» de Bonig

El discurso de Cantó contrastó especialmente con el de la presidenta de los populares valencianos, Isabel Bonig, que aseguró que aunque los ciudadanos están desorientados ahora es el momento de la lealtad institucional porque la unidad hará más fuerte a los valencianos. Bonig añadió que en política no todo vale y que el PP sabe lo difícil que es tomar decisiones excepcionales (en referencia a la suspensión de las fallas) porque conoce como nadie la soledad a la hora de adoptarlas, sobre todo cuando la oposición no está la altura, en referencia a pasadas crisis que afectaron al PP.

El portavoz del PSPV, Manolo Mata, aseguró que el discurso de Bonig era impecable mientras el de Cantó provenía de una persona que no estaba «en sus cabales» y solo aportaba «miseria moral». La portavoz de Podemos, Naiara Davó, le acusó de bajeza y Fran Ferri (Compromís) de ponerse el traje de la ultraderecha justo ayer que los diputados de Vox no acudieron tras contagiarse su portavoz.

Bonig ofrece medidas al Consell

En cambio, Bonig propuso un plan de actuación inmediata con cinco puntos y una dotación de 1.000 millones de euros con «medidas concretas de aplicación inmediata y asumibles». Medidas de carácter sanitario, económico y también dirigidas a los colectivos festivos que se ven afectados por la suspensión de las Fallas y La Magdalena de Castelló.

Y mientras Bonig acabó su discurso con una oración a la Virgen de los Desamparados, Mata imploraba que la ciencia no pare de investigar para lograr una solución a la pandemia.

Mientras, se ha aplazado durante 29 días el juicio contra la Gürtel por los amaños de la visita del Papa a Valencia de 2006. La Sección Segunda de la Sala de lo Penal, que celebra el juicio oral por los presuntos amaños en la contratación de la organización de la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia en 2006, ha decidido suspender momentáneamente las sesiones hasta dentro de 29 días a causa de la epidemia de coronavirus que afecta especialmente a Madrid.