El presidente de la Generalitat, Ximo Puig ha comparecido para informar sobre la videoconferencia con el presidente del Gobierno Pedro Sánchez y el resto de presidentes autonómicos para "dar respuesta al estado de alarma".

Puig ha asegurado, sobre la crisis de salud pública, que "los próximos serán los más complicados. Es un incremento que ya preveíamos y se mantendrá. Por eso es importante seguir las recomendaciones de las autoridades". El jefe del Consell ha llamado a "estar unidos, tener paciencia y ser constantes". También ha reconocido el trabajo de los sanitarios, empleados de comercio y de servicios públicos que garantizan la asistencia diaria.

El jefe del Consell también asegura que ha trasladado a Pedro Sánchez "que cuenta con todo el apoyo de la Comunitat Valenciana y he puesto en valor la importancia de la reunión de todas las comunidades. A pesar de las discrepancias queremos trabajar juntos para resolver esta crisis sanitaria". Puig ha añadido que "el estado autonómico es vigoroso y funciona. Trabajamos desde la lealtad instuticional, pero el problema trasciende fronteras".

Por ello el presidente de la Generalitat considera que "lo inmediato es dar respuesta a la crisis sanitaria para que se pueda trabajar en condiciones. Pero somos conscientes del impacto económico: una crisis de salud pública global, que exige una respuesta global. Que el G-20 tome decisiones. La Unión Europea no nos puede fallar. Europa se juega su futuro y no podemos admitir ningún fracaso. No puede ser la misma respuesta que en la crisis de 2008, ahora debe ser más adaptada a las necesidades".

Ant la gravedad de la situación, Puig considera que "hay que aumentar las medidas paliativas y la respuesta a la incertidumbre de los trabajadores y trabajadoras, que los autónomas se sientan apoyados, y que las empresas sientan el apoyo de los gobiernos y la voluntad de permanencia en el futuro".

Respecto al clima en el que se ha desarrollado la conferencia de presidentes, la primera que se celebra en la historia por videoconferencia, Puig ha explicado que "ha sido en un clima de serenidad, de entender la difícil situación que vivimos. Ambiente positivo, no de reproches, aunque sí distintas opiniones. Valoro la presencia de todos los presidentes y hay voluntad común de trabajar juntos".